Unas 300 familias que residen en una zona de Parque de la Reina reclaman al Ayuntamiento de Arona la puesta en funcionamiento del alumbrado público. Se trata del conjunto que forman cuatro comunidades vecinales, entre ellas la de Moncayo, que llevan cuatro años sin disponer de este servicio público.
Estas edificaciones fueron realizadas por varias empresas constructoras, alguna de ellas desparecida como consecuencia del efecto de la crisis económica. "Durante los primeros años, mientras a los constructores les hizo falta para vender los pisos, sí contábamos con alumbrado público", señala uno de los portavoces vecinales.
Mientras se produjo tal situación, fueron los constructores "quienes asumieron el pago de ese consumo energético, pero una vez que ya vendieron todos los pisos, empezamos con los problemas".
Eso ocurrió hace unos cuatro años. Desde entonces, esta parte de Parque de la Reina permanece a oscuras. "La consecuencia es que sufrimos robos, tanto en las casas como de vehículos, y también padecemos los efectos del vandalismo", apunta la misma fuente vecinal.
Hace año y medio que representantes de estas 300 familias que viven en Parque de la Reina trasladaron al gobierno municipal aronero su preocupación por esta circunstancia y "demandando la necesidad de contar con el servicio de alumbrado público".
El problema está, según traslada el propio Ayuntamiento de Arona, en que "la zona no ha sido recepcionada aún por la Administración municipal". Consecuentemente, correspondería a las empresas constructoras prestar y hacer frente al servicio que reclama esta población. "Pero, claro, hay constructoras que ya no existen y nosotros seguimos pagando los impuestos municipales a cambio de servicios a los que consideramos que tenemos derecho", manifiestan.
Esta población empieza a expresar su "cansancio, hastío y malestar" por el caso omiso que hacen a su petición, teniendo en cuenta que "se trata de algo que es necesario para esta zona porque estamos hablando de cuestiones relacionadas con la seguridad". Los vecinos mantienen que, a pesar de todo, "seguiremos reclamando lo que nos corresponde como población de derecho que somos". En cualquier caso, hay quienes no descartan realizar una acción de protesta.