Los nueve locales de que consta la urbanización Mencey Añaterve, en Güímar, están habitados por okupas. Una situación que actualmente se encuentra en proceso judicial, según informó ayer la alcaldesa, Carmen Luisa Castro, quien indicó que estos recintos pertenecen al Gobierno de Canarias a través de la Consejería de Vivienda.

La Asociación de Vecinos Añaterve Achbinico reclama al Ayuntamiento de Güímar, "por enésima vez", una solución "y que estas personas sean realojadas en viviendas adecuadas". Su presidente, Jonathan Díaz, recordó que en septiembre de ese año, durante una reunión celebrada en el salón de plenos con el gobierno municipal, la alcaldesa se comprometió "a solucionar esta situación de orden público y servicios en el plazo de quince días", tal y como informó entonces la Alcaldía en un comunicado oficial.

Esta situación se registra desde mediados del año 2013 en una urbanización construida en 1973. A los ocupantes de los locales les atribuyen sus convecinos la sustracción tanto de agua como de luz con cargo al resto de los habitantes de la zona. Asimismo, los responsabilizan de causar algunos altercados en el entorno y de contribuir a enrarecer el clima de convivencia.

En cualquier caso, el presidente de la asociación entiende que lo procedente es que quienes viven en estos nueve locales se beneficien de un alquiler social en viviendas dignas, coste que debería asumir la Corporación municipal.

Los locales en cuestión aparecen externamente acondicionados, con puertas y ventanas e, incluso, con alguna antena parabólica. Los jardines, sin embargo, están completamente descuidados sirviendo de parapeto. Además, cuentan los vecinos que en algunos de esos salones "hay perros de razas catalogadas como peligrosas".

Ruidos, malos olores, daños en bienes privados, peleas... Todo ello se ha registrado durante los casi tres años transcurridos desde que llegara el primer okupa a estos recintos de la urbanización Añaterve. Se trata, además, de personas que no disponen de recursos para acceder a un alquiler.