Los vecinos de Bajo la Cuesta no recibieron ayer el decreto de desalojo de sus viviendas porque el documento sigue sobre la mesa del alcalde, pendiente del informe jurídico. Mientras, el Ayuntamiento de Candelaria comenzó a trabajar para dar solución a la inestabilidad del tramo que discurre desde la autopista del Sur hasta el poblado. Ayer, el alcalde en funciones, José Gumersindo García, acompañado por la concejal María Concepción Brito, se reunieron con el director de Infraestructura Viaria del Gobierno de Canarias, Juan Ventura Medina, y con técnicos de la Consejería de Obras Públicas, Transportes y Política Territorial.

El encuentro permitió comenzar a estudiar las posibles intervenciones a realizar en el talud de la ladera de Bajo la Cuesta para asegurar la zona, evitando con ello el peligro de desprendimientos, según un comunicado oficial del gobierno municipal en funciones. El mismo a través del que indicaron que, "teniendo en cuenta que se trata de una competencia en la que intervienen diferentes administraciones, se ha convocado una nueva reunión para este jueves 11 de junio a la que también se convocará a responsables del Cabildo de Tenerife".

Como una "guerra de nervios" calificó la representación legal de los vecinos la situación en la que se encuentran estos. José Ortega no se explica "esta forma de proceder después de haberles anunciado que les entregarían el decreto de desalojo el lunes".

Técnicos de la Consejería de Obras Públicas, Transportes y Política Territorial visitaron ayer Bajo la Cuesta e inspeccionaron el estado en el que se encuentra la malla que colocaron "deprisa y corriendo" hace varios años.

Antonio Oliva, uno de los portavoces vecinales, reiteró ayer que "solo el juzgado me obligará a marcharme de mi casa. Si no, yo no me voy de aquí", decisión que secundará la práctica totalidad de los vecinos de las 50 casas que forman este poblado.

"Diálogo, sí, pero que intenten echarnos de nuestras casas cuando hay pendiente una sentencia por nuestra denuncia contra el decreto de demolición de la Dirección General de Costas, no", apunta.

Los habitantes del lugar sostienen que en esta nueva polémica subyace el empeño por dejar expedito el poblado "antes de dejar la Alcaldía", porque "aquí nadie quiere que pase una desgracia, pero si en 50 años nadie ha arreglado nada y no ha ocurrido nada, si lo que han hecho en este tiempo es construir un tercer carril en la autopista encima de nosotros, parece obvio pensar que hay algo más en todo esto".

La excusa para que el gobierno municipal encargara un informe externo sobre el estado del talud de Bajo la Cuesta es la caída de una piedra sobre un vehículo desde la zona en la que no colocaron malla.