El Ayuntamiento de Candelaria ordenó ayer el cierre al baño de la playa de El Pozo por el vertido accidental de aguas fecales al mar en la zona. Agentes de la Policía Local de Candelaria pudieron constatar la existencia de una fuga de aguas residuales tras recibir una denuncia vecinal.

Según informa el Consistorio candelariero, "el vertido se ha producido por una incidencia en la estación de bombeo, que provocó que el vertido evacuara por el aliviadero. Cuestión ha quedado solventada desde esta misma mañana (ayer) por la empresa Aqualia".

Tras tener conocimiento de este vertido, la Concejalía de Sanidad del Ayuntamiento de Candelaria se solicitó a la Dirección del Área de Salud de Tenerife que realizar una inspección en la zona afectada, así como un análisis de la calidad del agua en esta zona de la costa del municipio, acciones que se han desarrollado, según el gobierno local (PSOE-CC), en la misma mañana de ayer.

El cierre de la playa se adopta como "medida de protección de la salud", recalca el gobierno local, que añade que "se mantendrá hasta que se verifique por parte de la Dirección del Área de Salud de Tenerife que la zona es apta para el baño".

Usuarios de la playa han asegurado a EL DÍA que este tipo de vertidos son un problema recurrente en esta zona y en otras de la costa de Candelaria, "debido a que la red de saneamiento presenta muchos problemas, en especial en los días de lluvia, ya que las aguas pluviales se mezclan con las residuales".

Estas mismas fuentes señalan que el vertido se inició el pasado fin de semana, debido a una avería en la estación de bombeo cercana a la playa de El Pozo.

Sí Se Puede en Candelaria propuso esta semana al pleno, sin éxito, la puesta en funcionamiento la Estación Depuradora Comarcal de Aguas Residuales, "para garantizar la correcta depuración de las aguas residuales del Valle de Güímar", y evitar este tipo de vertidos fecales al mar.