Al encontrarse en zona de dominio público marítimo-terrestre y de servidumbre, Costas obliga a demoler la plaza de Puerto de Santiago, en Santiago del Teide. Se trata de una actuación contemplada por el gobierno municipal actual que ya proyecta la mejora y acondicionamiento de este entorno. La medida supondrá la recuperación de las calas naturales que eliminó la plaza, así como la creación de una galería comercial y un espacio público para el ocio, así como un parquin subterráneo. Todo ello culmina en una vía en el nivel superior.

Esta actuación es una de las prioridades marcadas por el gobierno de Emilio Navarro. Construida en la etapa intermedia de Pancracio Socas como alcalde santiagués, era una de las piezas esenciales en otro proyecto que nunca se realizó, Lago Santiago. Surgido en los primeros años 90 con un coste superior a los cuatro millones de euros. La idea, definida entonces como "una infraestructura clave para el desarrollo de la zona turística", no fructificó.

El gobierno municipal actual presentó en Costas un proyecto que contempla, en su cota inferior, la recuperación de la línea natural de la costa, la zona de acceso a la playa y el dragado del barranco; para su nivel intermedio, se proyecta una plaza, un área comercial lineal, un paseo y un parquin subterráneo; mientras que para nivel de cota superior se reserva un tramo de calle, un viario restringido, la continuidad del paseo marítimo y el acceso hacia los niveles inferiores mediante rampas, entre otras cosas.

El alcalde, Emilio Navarro, señaló que se trata de una de las actuaciones preferentes para el mandato que revalorizará esta franja de la costa.