La Sección Sexta de la Audiencia Provincial comenzará hoy, hasta el viernes, el juicio de la última pieza separada del caso Arona, en la que aparecen como acusados el exalcalde José Alberto González Reverón y la subinspectora de la Policía Local, Hortensia García.

José Alberto González Reverón se enfrenta a la petición, por parte de la Fiscalía, de dos años de cárcel y 15 de inhabilitación por los presuntos delitos de prevaricación, tráfico de influencias y coacciones. Para Hortensia García, el Ministerio Fiscal plantea la inhabilitación especial por un periodo de ocho años acusada del supuesto delito de prevaricación.

Son seis los asuntos que se juzgan en esta pieza separada del caso Arona. Ambos aparecen solo en el referido a un concurso para ocupar 10 plazas de la Policía Local, considerándose a ambos partícipes de una trama para la presunta adulteración de los resultados a fin de favorecer a un aspirante.

Otro de los hechos que se juzga es el intento supuesto del exalcalde de favorecer la legalización de la vivienda de un concejal y familiar suyo, Manuel Reverón, así como por favorecer a un amigo de su hijo haciendo que la guardería municipal concediera una plaza a un niño que incumplía los requisitos.

En su faceta de conseguidor de trabajo, esta pieza separada del caso Arona juzga a José Alberto González Reverón por haber "enchufado", supuestamente, a nueve personas, seis de ellas a la empresa concesionaria del servicio de limpieza y recogida de basura.

El exalcalde también será juzgado por actuar, al parecer, ante la Oficina de Recaudación Municipal del Ayuntamiento de Arona y ante un agente de la Policía Local cuando, siendo alcalde, pretendió impedir que un vecino pagara las multas de tráfico.

José Alberto González Reverón fue condenado, en 2012, a cuatro años y medio de inhabilitación para cargo público en la administración local por la contratación irregular de dos trabajadoras. En marzo lo fue como autor de un delito de prevaricación por permitir obras ilegales en el hotel Sir Anthony. Son otros siete años. Falta por conocer la del grueso del caso Arona, en el que le piden dos años de prisión y otros 10 de inhabilitación.