El reto de Güímar para este año es restablecer los servicios básicos en parámetros de calidad y de solvencia. Gustavo Pérez, primer teniente de alcalde, es consciente de que "Güímar sufre contratos anticuados y prestaciones que están muy lejos de lo que demandan los vecinos". Pero es optimista: "Nos llega una gran oportunidad, llevamos trabajando mas de un año para cambiar Güímar y eso se verá muy pronto".

Con la base de "mucho debate técnico y la implicación excelente de los profesionales del ayuntamiento", Gustavo Pérez se muestra convencido de que "le vamos a dar un vuelco" a cuestiones esenciales como limpieza, recogida de residuos, abastecimiento y saneamiento de aguas y el servicio de parques y jardines. "En algunos casos, las mejoras supondrán un incremento de personal y de recursos materiales del 40%".

Güímar Emprende es un plan puesto en marcha por este concejal y su repercusión en el mercado laboral ya se percibe. "El paro es el mayor problema de Güímar. Hoy hay 2.420 desempleados y antes de desarrollar nuestro plan socioeconómico Güímar Emprende la cifra era de 3.130. El descenso en más de 700 parados se debe a las tendencias y a una labor nunca hecha en el municipio, que es la gestión directa entre empresarios y demandantes de empleos". Con el apoyo de las pymes y del programa insular Barrios por el Empleo, pero "aún así, el nivel de paro en Güímar es insostenible, hay que seguir trabajando en esa línea e incrementar los recursos para darle soluciones a aquellas familias que tiene todos sus miembros en paro".

Gustavo Pérez plantea el futuro como una oportunidad que precisa planificación. "Desde CC lo tenemos claro, el Plan Güímar Emprende y su equipo nos está dando una visión integral del municipio y nos marca las acciones a realizar". Fortaleciendo las condiciones diferenciadoras del lugar, "debemos intentar subirnos al carro del turismo, pero evitando complejas situaciones que generan conflictos enquistados, competitividad con otras zonas de la Isla o un quita tú para ponerme yo".