El Ayuntamiento de Arona tiene para este año un presupuesto que supera los 100 millones de euros y que está centrado en la inversión y la política social, ha dicho hoy en rueda de prensa el alcalde, José Julián Mena, quien ha estado acompañado de la concejala de Hacienda, Raquel García.

Las cuentas se incrementan en un 6,2 por ciento con respecto a las de 2016 e incluyen un descenso de los impuestos que pagan los vecinos, ha indicado el alcalde.

Sobre inversiones en los barrios el alcalde destacó el reasfaltado de vías, así como mejora de aceras, parques infantiles o instalaciones deportivas, entre otras, y que alcanzarán en este ejercicio los 15 millones de euros.

Raquel García subrayó que el presupuesto "cumple el criterio de estabilidad presupuestaria y sostenibilidad financiera, busca la eficiencia y la eficacia de la gestión municipal y supone un esfuerzo de transparencia".

Estas cuentas permitirán abordar una bajada del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) en Arona para 2018, a la que seguirán otras medidas de recorte de la fiscalidad en los próximos meses, según han explicado los responsable locales.

"En los últimos dos años hemos hecho mucho y estos presupuestos tienen que seguir la senda del crecimiento y mejora de nuestro municipio", ha añadido el alcalde.

En cuanto a las políticas sociales, este apartado aumenta en 2017 un 11 por ciento, lo que supone un incremento de más de 442.000 euros.

Permitirá la incorporación de nuevo personal al área para agilizar la atención vecinal "siempre dentro del marco restrictivo que nos permite el Gobierno central", ha declarado Raquel García.

El incremento de las cuentas en este apartado contempla más de 500.000 euros en programas extraordinarios de empleo social, más fondos para apoyo al estudio.

El Ayuntamiento de Arona prevé también mantener los planes para atraer diversas actividades universitarias o aumentar en un 33 por ciento las ayudas a la rehabilitación de viviendas en todo el municipio.

El presupuesto saldrá adelante sin incluir la nueva Relación de Puestos de Trabajo (RPT), cuyas negociaciones se han retomado en las últimas semanas, lo que permitirá, previsiblemente, su aprobación en un corto plazo de tiempo.