El Gobierno de Canarias cerrará en los próximos días un centro de mayores de titularidad privada en Güímar tras las múltiples denuncias recibidas por el establecimiento y al concluir que este vulnera la normativa vigente en diferentes aspectos. Los responsables de la residencia Sor María de Jesús, situada en la calle Calvario del municipio sureño, ya han recibido el correspondiente apercibimiento de la Consejería de Políticas Sociales del Ejecutivo autonómico.

Según ha podido saber este periódico, el Gobierno tiene constancia de denuncias presentadas por el Servicio Canario de la Salud (SCS), el Ayuntamiento de Güímar, los servicios de Inspección y extrabajadoras del centro de las que se desprende que el establecimiento no cumple distintos requisitos de seguridad exigidos por la normativa y proporciona una deficiente atención a sus usuarios, que ascendían a una veintena cuando se iniciaron las investigaciones pero ahora podrían rondar los trece. No obstante, la Administración no tiene confirmación de este dato porque no se le ha permitido la entrada en el recinto.

Las denuncias apuntan a que la residencia se encuentra en malas condiciones, presenta problemas de alimentación, cuenta con escaso personal para atender a los ancianos alojados en ella y tiene riesgos para la seguridad, circunstancias todas ellas que han aconsejado al Ejecutivo regional a llevar a cabo el cierre cautelar, una medida que se tomará en un plazo máximo de quince días después de la presentación del apercibimiento a sus responsables. Según información recabada por este periódico, la Administración ha requerido a la dirección del centro que realice las mejoras necesarias para subsanar los incumplimientos en los que incurre sin que estas hayan sido llevadas a cabo.

Una vez se proceda a la clausura del recinto, los usuarios serán reubicados, bien en domicilios de familiares o bien en otras residencias de mayores, si la primera opción no fuera posible.