Resulta incuestionable que en los últimos años la actividad económica relacionada con el parapente orientado a los turistas ha crecido considerablemente en el Sur de Tenerife. A pocos kilómetros de las playas y los hoteles existen plataformas adecuadas para el despegue de parapentistas. Y también hay un mercado potencial de decenas de miles de turistas.

Sin embargo, la Asociación Profesional de Parapentistas de Tenerife advierte de que no todas las empresas que ofrecen "tándem" (dos plazas, una para el turista y otra para un parapentista veterano) operan dentro de la legalidad ni afrontan los mismos gastos para poder hacer negocio.

Este colectivo ha informado de esta circunstancia al Ayuntamiento de Adeje, al Cabildo tinerfeño y a la Inspección de Trabajo, pero sus demandas han tenido poco éxito. Uno de los miembros explica que "en Europa se ha corrido la voz de la falta de control que hay aquí". Y comenta que algunos "son parapentistas que no tienen la documentación ni el nivel de vuelo" necesario, según la misma fuente.

Para el representante de la Asociación, "la legislación exige que los monitores sean técnicos deportivos en parapente, así como que el empresario esté dado de alta" para llevar a cabo la actividad económica y tener su inscripción en el Registro General Turístico.

Otro de los requisitos para quienes cobran a turistas para volar es disponer de un seguro de responsabilidad civil, cuya póliza cubre hasta los 600.000 euros.

Y, además, para el transporte de los clientes se exige una tarjeta de transporte, emitida por el Cabildo de Tenerife. Una de las condiciones para poder acceder a uno de estos permisos por primera vez es que el furgón o vehículo usado tenga menos de dos años de antigüedad. El portavoz de la entidad, Cristo Afonso, comenta que algunos "empresarios" que no cumplen con la normativa utilizan un "seguro federativo", que está pensado para los deportistas. Según Afonso, si se produce un accidente, los monitores vinculados a esas sociedades irregulares explican que estaban volando "con un amigo o un familiar que está aquí de vacaciones", con lo que esconden su verdadera actividad. El representante de la Asociación Profesional de Parapentistas de Tenerife comenta que, actualmente, en la zona de Adeje operan una decena de empresas aproximadamente. Y, de ellas, apenas tres cuentan con toda la documentación y autorizaciones requeridas. Apunta que, al resto, "si no les falta un papel, les falta otro". Cristo Afonso lamenta la falta de medios suficientes para llevar a cabo una inspección eficaz de la actual realidad por parte de diferentes organismos, sobre todo porque, cuando proliferan los accidentes, se genera una mala imagen para la Isla como destino turístico.

"Todo sigue igual casi dos años después"

La Asociación Profesional de Parapentistas de Tenerife aclara que hay que diferenciar cuando un turista decide volar en solitario en parapente porque tiene algunos conocimientos y se arriesga, por lo que puede tener una caída; y cuando una persona que pasa sus vacaciones en Tenerife y, sin experiencia previa, decide volar en tándem y también sufre un accidente. Cristo Afonso, junto a otro empresario, Armando García, advierten de que se sabe qué empresa está ilegal cuando sus trabajadores se esconden al ver a la Policía. Desde hace años, las plataformas de salida de los parapentes en el término municipal de Adeje están situadas en la zona de Taucho (Los Cercados-Pared de Los Lirios), Los Llanos e Ifonche. Varias de las empresas tienen su zona habitual de aterrizaje en las cercanías de la playa de La Enramada, junto a La Caleta. En agosto del 2016, el colectivo envió un escrito al Ayuntamiento adejero para informar "de nuevo de la situación de inseguridad y mala imagen turística que se está viviendo (...) con las empresas de vuelo en parapente tándem". En ese texto se solicitaba al consistorio que "actúe para controlar esta desagradable situación, la inseguridad y mala imagen que da al turista que viene a Costa Adeje". Y en diciembre del año 2015, la Asociación Profesional realizó cuatro escritos al Cabildo, donde dejaba claro que "hay empresas dedicándose al parapente, exactamente al vuelo biplaza, con turistas y como guías, sin tener licencia de transporte para los vehículos muchas de ellas". En esa ocasión, el colectivo realizó un listado con los modelos de vehículos, matrículas y color que operaban supuestamente de manera irregular. Y, además, se informaba de la carretera utilizada principalmente para llegar hasta la parte alta de Adeje. Varias de las supuestas empresas que actúan sin tener toda la documentación, según la Asociación, también fueron denunciadas ante la Inspección de Trabajo. Sin embargo, casi dos años después, todo sigue igual, según el colectivo.