El Pleno del Ayuntamiento de San Miguel de Abona aprobó, con los votos del gobierno local, el presupuesto municipal de 2018 por 16.050.057,97 euros, un 6,64% más que el anterior. Destaca el hecho de que la cancelación de la deuda pública y la optimización del gasto "hará que se acometan más obras y otras inversiones".

El grupo de gobierno resaltó el crecimiento del 10% en emergencia social (95.000 euros) y del 25% en ayudas al estudio (60.000 euros), así como los 700.000 euros (sube el 10%) para el fomento del trabajo a través de empleo social y los programas de formación en alternancia.

Casi dos millones de euros de recursos propios y otros 450.000 a cofinanciar (con el Cabildo) se emplearán durante este año para realizar obras de saneamiento infraestructuras, no estando previsto el aumento de la carga impositiva, reduciendo el valor catastral del IBI al 4%, con la que los vecinos se ahorrarán 200.000 euros.

"Es un presupuesto pensado para las más de 20.000 personas que viven en San Miguel de Abona, que garantiza el mantenimiento de los servicios públicos fundamentales", dijo el alcalde, Arturo González, quien también señaló el esfuerzo en materia social y "en la apuesta por el empleo".

El alcalde resaltó el mantenimiento de los servicios fundamentales y el esfuerzo social

Valentín González, el portavoz del Centro Canario (CCN), se mostró muy crítico con las formas de proceder del gobierno loca, al que acusó de que ni siquiera busca el consenso, además de que vuelve a incumplir la promesa electoral de celebrar las sesiones plenarias por la tarde. Desde la perspectiva del CCN, "estamos ante más de lo mismo".

El gobierno municipal (CC-PSOE) aseguró que "estamos ante el pleno de un presupuesto realista, coherente y prudente".