El área de Carreteras del Cabildo de Tenerife ha repuesto recientemente el alumbrado de la autopista del Sur (TF-1) entre el polígono industrial de Güímar y Santa Cruz de Tenerife. Esta actuación, que ha costado 443.521 euros, se inició el pasado verano y ha servido para poner fin a varios años de apagón obligado por los continuos robos de cable de cobre.

La administración insular ha tenido que reponer más de 100 kilómetros de cable eléctrico robado para poder abastecer a las mil luminarias que dan luz a este tramo de la TF-1.

Durante los trabajos también se revisaron las arquetas de canalización de este importante sistema de alumbrado público y se establecieron nuevos sistemas de seguridad, también en las farolas, para evitar que los robos continúen como en el pasado.

Estos trabajos se adjudicaron en marzo del año 2017 y, según explicó entonces el director insular de Fomento del Cabildo insular de Tenerife, Miguel Becerra, "para evitar el robo de cable se sellarán las arquetas y las farolas de la autopista del Sur".

El robo de cable ha afectado de manera importante al alumbrado de la TF-1 en los últimos años. La sustracción del cableado ha generado importantes pérdidas económicas a las arcas insulares, ya que la instalación estaba en perfecto estado antes de que se produjeran las sustracciones.

En enero del año 2014, el exconsejero insular de Carreteras José Luis Delgado (PSOE) ya reconocía que su área había optado por apagar el alumbrado de la autopista "por la sustracción del cable poco después de su puesta en funcionamiento". Delgado afirmaba hace ya cuatro años que la TF-1 es la vía dependiente del Cabildo insular que "más ha sufrido el robo reiterado de cable de cobre". Un delito que fue muy habitual en los años más duros de la crisis económica.

Cuatro años después, el Cabildo tinerfeño ha logrado reponer el cableado necesario para que los conductores que transitan por la TF-21 puedan hacerlo con mejores condiciones de visibilidad y seguridad.