Hasta hace unos años el hackeo era realizable solamente por informáticos con amplios conocimientos. Sin embargo, durante la última década Internet se ha expandido hasta el punto en que incluso personas con no demasiada experiencia navegando por la red se ven capaces de sacarles partido a las vulnerabilidades de los sistemas tecnológicos gracias a portales como Hackear.com que cuentan con las herramientas oportunas para hacerlo.

Tanto las utilidades destinadas al hackeo como los tutoriales se centran principalmente en vulnerar los contenidos privados que albergan los perfiles de redes sociales. Es por ello que conviene prevenir contratiempos de este tipo actuando cuanto antes con tus propias cuentas para que su nivel de seguridad sea máximo.

La importancia de la contraseña

Todo aquel que averigüe la clave que da acceso a tu perfil de una red social podría causar estragos no solo suplantándote la identidad, sino también realizando otras acciones incluso más perjudiciales. Así pues, es altamente recomendable darle a la contraseña la importancia que merece.

A la hora de crearla evita hacer uso de términos que guarden relación con tu vida: aficiones, mascotas, fechas de nacimiento y datos similares no deberían estar presentes en ninguna clave si se pretende que la misma haga gala de una buena seguridad. Aunque de poco sirve si no la renuevas habitualmente.

Si bien es cierto que supone un gran paso el hecho de contar con una clave muy difícil de adivinar un requisito indispensable se resume en cambiarla cada dos o tres meses. Puede darte pereza, pero lo agradecerás enormemente cuando pasen los años y tu perfil de red social siga intacto.

Correos electrónicos sospechosos

Es probable que en alguna ocasión hayas recibido algún que otro e-mail en el que se te invita a iniciar sesión con tu cuenta de, por ejemplo, Instagram. En el correo electrónico se detalla el motivo, el cual puede abarcar desde una actualización de los términos de privacidad que debe ser aceptada hasta una petición de amistad. Este tipo de artimañas son utilizadas para Hackear Instagram Online y resultan efectivas, puesto que cada día son innumerables los usuarios que acaban cayendo en la trampa.

Antes de abrir el mensaje conviene comprobar el remitente. Incluso si confías en él presta mucha atención al enlace proporcionado. ¿Han usado un acortador de URL o la página web no es la oficial de la red social en cuestión? En tal caso marca rápidamente el e-mail como spam y nunca más procedas a abrir un correo enviado por dicha dirección. De esta manera evitarás el phishing que en pleno 2018 sigue siendo muy productivo para los hackers de todo el mundo.

Antivirus: útiles en ordenadores, ¡pero también en móviles!

La sociedad está plenamente concienciada de lo importante que es contar con un buen antivirus en el ordenador tanto de sobremesa como portátil. A pesar de ello, no muchas personas tienen instalada una aplicación en su smartphone que actúe repeliendo las amenazas que, por supuesto, también circulan por el mundillo de los teléfonos móviles.

Ello acarrea que los expertos en Hackear Snapchat Online y en adentrarse en otros perfiles de redes sociales obtengan la información que desean sin ningún tipo de impedimento por muy precavido que seas cambiando regularmente tu contraseña y evitando acceder a los e-mails sospechosos.

Debes saber que a día de hoy son multitud las alternativas cien por cien gratuitas que le otorgan a tu dispositivo telefónico una protección a la altura del mejor antivirus de ordenador. Gracias a ello evitarás spyware, malware y tantos otros elementos de carácter malicioso que pueden comprometer los contenidos que alberga tu perfil.

Otras recomendaciones a poner en práctica

Los consejos sacados anteriormente a colación son muy importantes, aunque no se quedan atrás las siguientes pautas que conviene seguir al pie de la letra dando pie a que, sea cual sea la red social de la que hagas uso, permanezcan intactos los contenidos que publiques en ella.

Por ejemplo, es tentador el hecho de aceptar solicitudes de amistad para engrosar el número de contactos visible en redes sociales como Facebook y Twitter, aunque tarde o temprano podría traducirse en un mayor riesgo de hackeo si los perfiles desconocidos que pasan a poder acceder a tu información personal tienen otras intenciones más allá del clásico cotilleo digital.

A su vez, una recomendación muy útil es la de optar por el protocolo https en lugar del tradicional http al acceder a las páginas web oficiales de tus servicios favoritos, ya que el primero que ha sido mencionado ofrece una protección más sólida al entrar en portales online como las redes sociales que utilizas prácticamente a diario.

Con todos estos consejos tus perfiles de Facebook, Twitter, Instagram, Snapchat y muchos otros servicios similares estarán a buen recaudo independientemente de si accedes a ellos a través de tu ordenador o mediante los dispositivos móviles que siempre tienes a mano.