Si la vida nos planteara una encrucijada, ¿qué escogeríamos? ¿El lugar de los que ayudan o recibir la solidaridad de los demás? ¿Llamar a la puerta de una ONG o ser activistas sociales en primera línea? La cooperación es una herramienta profesional para unos, una forma de vida para otros, y en cualquier caso la bonanza de la solidaridad siempre es bien recibida. Infinitas veces son rostros anónimos los que tienden la mano a los niños en algún lugar del mundo. La pugna social, entre la no politización de las asociaciones de derechos humanos y la no mediatización en los medios de comunicación haciendo un uso indebido de la cara de la pobreza para obtener logros personales o económicos, sucumbe ante un arduo aprendizaje, que pone a prueba las convicciones personales de cada uno. Cómo se traslada la imagen de la pobreza desde las instituciones públicas canarias en cuanto a cifras alarmantes se refiere y estallidos sociales en potencia; cómo se gestiona este mismo conflicto a nivel político y cómo se resuelve económicamente conlleva a campañas sin descanso por parte de muchas ONG tinerfeñas para seguir cumpliendo con sus proyectos y brindar ayuda puntual y efectiva a los más desfavorecidos. En Canarias la cooperación tiene rostro de mujer en un porcentaje altísimo, dada la sensibilidad y contacto con la realidad femenina en situaciones de riesgo. Para el alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, "las ONG alcanzan lugares donde no llegarán jamás las administraciones públicas, haciendo una labor extraordinaria, en consonancia con estas". Por su parte, el edil de Fiestas, Fernando Ballesteros, apunta al "trabajo discreto y silencioso, en las diferentes líneas de acción de las entidades sin ánimo de lucro". Otros testimonios femeninos ilustran el abanico de posibilidades de realización de las mujeres canarias, en el día a día, en el marco de la cooperación. He aquí algunos de ellos:

Marta Arocha, gerente del Instituto de Atención Sociosanitaria, IASS. ¿Cuál es el papel activo de la mujer en la solidaridad? Desde el IASS, contamos con una red de violencia de género, de las más pioneras de toda España, dónde hay un vínculo muy cercano de trabajo, entre las mujeres agredidas, que son recibidas por trabajadoras sociales y psicólogas. Ellas no lo viven sólo como una profesión, sino como una vocación. Tratamos de bajar las listas de espera en la red insular, y contamos con la gran ayuda de entidades como el Instituto Canario de Igualdad, Cáritas..., entre otros. En ocasiones, el nivel económico y cultural de la mujer maltratada es muy alto, y la violencia de género se encuentra en todos los estamentos sociales. Contamos con un presupuesto de 102 millones de euros, aplicándolo entre la prevención y la ejecución de proyectos.

Elena Marco, coordinadora provincial de Cruz Roja en Tenerife. ¿La mujer es reconocida en su trabajo social? Obviamente tiene un lugar muy relevante, pero no es la protagonista. El hombre suele ocupar la imagen mediática, mientras la mujer impulsa la acción y la trabaja. Los hombres se frustran si no cumplen eficientemente el rol económico, mientras la mujer es la que toca la puerta pidiendo ayuda, porque reconoce la crisis. Desde Cruz Roja tratamos de llegar a la máxima respuesta, y no siempre podemos cubrir a todas las personas. Hay que sensibilizar todo el tiempo, empoderar a las personas y cumplir a continuidad con los proyectos. En este momento, apostando por la campaña "En realidad, no tiene gracia", que será un éxito.

Isauri Molowny, directora del comedor infantil Padre Laraña. ¿Situación alarmante con la pobreza infantil? Debemos ser conscientes de la realidad y de la falta de recursos de algunas familias. Por otra parte, hay que enseñar a la gente a que tome su caña de pescar, en lugar de recibir el pescado, entendiendo estas palabras, en la enseñanza del empoderamiento social. Organizamos un evento de Deporte Solidario el próximo 8 de junio. Les esperamos.

Sonia Herrera, presidenta de Entrelazados. ¿La mujer desempleada está en riesgo de exclusión? Trabajamos en formación para el empleo, en convenio con ayuntamientos y apostamos por la reinserción laboral, en breve tiempo, y por supuesto del género femenino.

Patricia Álvarez, presidenta de Fundación Canaria Candelaria Solidaria: "La mujer desempeña un trabajo fundamental; todas formamos parte del gran abrazo de la solidaridad".

Beatriz Ruiz, delegada de África directo, en Canarias: "La cooperación y la solidaridad han de caminar separados de la política siempre, y la mayoría de las voluntarias en el mundo son mujeres. Las abrazo a todas desde Tanzania, en el proyecto Same, con niños discapacitados".

Gara Gómez, voluntaria de Protección Civil: "El voluntariado es una familia a nivel mundial. Seamos solidarios hoy con el que tenemos al lado; mañana podríamos ser nosotros".

Haridiam Bencomo, enfermera de la Red Transfusional Canaria: "Una gota de solidaridad, gotita a gotita, podemos ayudar a muchísima gente".

Inma Évora, coordinadora de Plataforma Antidesahucios en Tenerife: "Felicito a todas las mujeres solidarias, y señalar que las organizaciones que dependen de consignas políticas, no funcionan bien".

Martina Richter, presidenta de Harambee, construyendo un orfanato en Kenya, con sede en Tenerife, o asociaciones como Unapro, Amate, y Sinpromi, todos y cientos más, conforman el mapa profesional, consciente y solidario de Canarias.