Qué ganas tenía yo de escribir sobre esta boda! Una combinación perfecta de elegancia y sencillez, características que definen perfectamente la personalidad de sus protagonistas. Conozco a los novios hace muchos años. Ella, : actriz, modelo, presentadora y bellísima persona por dentro y por fuera; y él, David Santana: desde que lo ves inspira confianza. Pues se casaron ayer en la ermita de San Diego, en La Laguna, por cercanía familiar y sentimental de los abuelos del novio, mientras que la celebración fue en la Finca Zamora, todo perfectamente decorado por Jesús Rodrigues. Fue un desfile de gente guapa, en donde destacó, naturalmente Vanesa, que estaba vestida por los diseñadores Marco & María, que también vistieron a las madres de ambos, a la madrina (Mary Fraga), a las hermanas de la novia (Zenaida y Silvia Cabeza), a las dos sobrinas (Miriam Santana y Dasha), y como no, a la matriarca y abuela del novio, Teresa Fraga. También, Lituca, mujer de Javi Santana, estaba muy guapa con un vestido del diseñador americano A. Ortega. El peinado y maquillaje de la novia estuvo a cargo de su gran amigo y profesional Juan Castañeda; mientras que Alfonso Bravo y Enrique Tapia fueron los fotógrafos. Por su parte, Carlos Piedrabuena (Musicalia) puso la música y Lucas Gamonal, el almuerzo. El novio y el padrino, Francisco Félix Cabeza, también muy guapos con chaqué de Bounty. Como dije, un desfile de caras bonitas de Tenerife, Madrid, Barcelona y Venezuela. Entre otros: Carola Baleztena, directora de la gala Starlite de Marbella; Fabiola Martínez, mujer de Bertín Osborne; el compositor David Santiesteban y su mujer Gemma Lozano, todos grandes amigos de la novia. También asistieron Eli Azancot y Ricardo Aznar de Riskmedia Int. Barcelona, los socios del novio, y Miguel Vázquez, director de Real Madrid TV. En definitiva: una boda de ensueño y, sobre todo, muy divertida, tal y como se lo merecen sus protagonistas. Acontecieron mil anécdotas divertidas, como la sorpresa del grupo de música latina Mantinga con sonidos cubanos y cumbias, acompañados de mojitos y sombreros panameños para todos. ¡Y cómo no! momentos muy emotivos como el especial recordatorio al padre del novio, Javier Santana, que no les pudo acompañar en tal día especial. ¡Enhorabuena a todos! Espero no se me haya quedado a nadie... Y ahora, ¡qué sean felices y coman perdices!