Una alternativa de lo más cómoda en Las Palmas de Gran Canaria es realizar la ruta guiada con la guagua turística (información: 902 10 10 81), cuyo horario permite realizar visitas a pie y continuar el paseo al ritmo que se desee.

De primeras, esta ciudad cosmopolita invita a no pocos "frentes" de ocio y solaz, en la que abundan alternativas de visitas a museos, al barrio histórico, el paseo por la playa de Las Canteras, ir de compras o, incluso, deportes náuticos.

En los últimos tiempos, la capital de la isla vecina también se ha esmerado en elevar el nivel de la restauración y, cómo no, los ambientes para disfrutar de terrazas en plazas, calles peatonales o junto al mar -todo ello en cualquier época del año- son un acicate para tomar una copa en completo solaz.

Para la tarde o noche, se pueden consultar (en los enlaces que en este reportaje se proporcionan) vertientes de solaz adecuada a cada gusto personal, incluidos los espectáculos que la ciudad ofrece para todo tipo de públicos, bien en sus auditorios y teatros o en la calle.

Aquí se proponen los imprescindibles, si nos animamos a ir marchar de escapada.

Vegueta-Triana

El paseo debe incluir la plaza principal, Santa Ana, con la Catedral, el Palacio Episcopal y las Casas Consistoriales junto a otros edificios nobles que conservan el sabor histórico y la arquitectura que sería exportada a América por los colonos.

Museo de Colón, Museo Canario, Museo Diocesano de Arte Sacro, San Martín Centro de Cultura Contemporánea o el Centro Atlántico de Arte Moderno (CAAM) permitirán descubrir una rica cultura que se puede complementar con la visita al Mercado de Vegueta y sus locales de cocina tradicional y terrazas de la calle Mendizábal.

Frente a Vegueta, Triana, con sus construcciones modernistas, sus comercios, terrazas, edificios singulares como el Gabinete Literario o el Teatro Pérez Galdós y la Casa Museo dedicada a este escritor, son argumentos más que suficientes para disfrutar de este barrio.

Ciudad Jardín-Alcaravaneras

En medio de la zona portuaria y el barrio fundacional se desarrolló la Ciudad Jardín, de colonos británicos, atraídos por las obras portuarias y, posteriormente, por el comercio internacional y el abastecimiento de los vapores que hacían escala obligada en los diques y tinglados del puerto.

La arquitectura singular permanece en este barrio de casonas que miraban hacia el mar y la playa de Las Alcaravaneras, donde se erigió el Real Club Náutico y, después, el imponente Muelle Deportivo.

Puerto-Canteras

El parque de Santa Catalina, con sus terrazas; la Casa del Turismo, oficina de información turística de la ciudad, uno de los inmuebles de referencia en la historia, y el Museo de la Ciencia nos sitúan en el centro de esta zona más moderna y activa de capital.

Junto a los centros comerciales de la avenida de Mesa y López, las tiendas de todo tipo que se reparten por toda esta demarcación y la playa de Las Canteras, con sus numerosos locales, se presenta como un paseo inmejorable junto al mar.

La playa recibe usuarios todo el año, con más de tres kilómetros de longitud, flanqueada por el Auditorio y Palacio de Congresos Alfredo Kraus, al oeste, y El Confital y La Isleta, al este.

Desde la arena, se puede disfrutar de unos espectaculares atardeceres cuando el sol se despide, con el Teide en el horizonte.

Una barra natural protege a los usuarios de franja de baño que, además, es plenamente accesible y dispone de todos los equipamientos de una gran playa urbana. En su orilla ondea la bandera azul de la UE y posee la Q de Calidad Turística y el certificado de gestión ambiental UNE-EN ISO 14001, que avala su condición de respeto al medio ambiente.

Si bien decíamos que el punto de partida podría ser el parque de Santa Catalina, este lugar también puede ser, cómo no, el punto final de nuestro recorrido con sus numerosos restaurantes y bares con terrazas, de lo más agradables para la tertulia.