La Federación de Usuarios Consumidores Independientes (FUCI) ha puesto en marcha una campaña para concienciar a los bañistas de la obligatoriedad de seguir una serie de pautas tanto si bañan en la playa, como en un río, pantano o piscina con el fin de evitar incidentes, lesiones e incluso ahogamientos.

Por este motivo, a través de las asociaciones federadas de FUCI se está tratando de concienciar a los bañistas, a los que se les traslada las normas a seguir en las zonas de baño para evitar sustos innecesarios o incluso fallecimientos como los más de veinte ocurridos durante el mes de julio.

Desde FUCI se considera prioritario el hecho de respetar las normas de seguridad y bañarse solo en zonas vigiladas por socorristas, sin olvidar que los padres o cuidadores deben vigilar atentamente a los menores cuando están en el agua o jugando cerca de ella, ya que los ahogamientos se producen de forma rápida y silenciosa.

En este sentido, seguir las indicaciones de los propios socorristas y las señalizaciones de la playa, como las banderas, pueden evitar también accidentes fatales. La verde significa apta para el baño, amarillo precaución y el rojo prohibición.

Nadar en paralelo a la costa y no hacia el fondo cuando estemos en la playa, no entrar de forma brusca al agua para prevenir cortes de digestión y mantener la calma ante situaciones de alerta son otras de las recomendaciones que trasladarán a los bañistas.

Por otro lado, desde FUCI insisten en que los menores deben avisar a los padres o cuidadores cuando se vayan a meter en el agua y siempre que se pueda bañarse acompañados. Si los niños no saben nadar, deben usar chaleco salvavidas si se meten en el agua o van a estar jugando cerca de ella; el chaleco es obligatorio en el caso de practicar algún deporte acuático.

En el caso de piscinas privadas, la mejor medida de seguridad es el cercado perimetral de la piscina, con una altura de 1,2 metros de altura, como forma de aislarla de la vivienda

Bañarse de noche o después de haber bebido alcohol es otra inconsciencia, ya que la ingesta de alcohol disminuye la capacidad de reacción ante el peligro y si ocurriera algo nadie podría verte.

Asímismo, y debido a que muchos de los accidentes durante la época estival se deben a zambullidas en lugares inadecuados, desde FUCI se recuerda a los bañistas que no deben lanzarse al agua en zonas desconocidas, con poca profundidad, desde una altura elevada o donde pueda haber obstáculos como piedras.

Así, antes de sumergirse es necesario comprobar la profundidad del agua y evitar bucear o saltar en aguas turbias donde pueden no ser visibles otros nadadores y objetos.

En caso de querer zambullirse en el agua, el bañista debe primero introducirse lentamente de pie varias veces, comprobando que la profundidad sea de al menos 1,5 metros.