El legendario músico Little Richard apunta a una más que posible retirada de los escenarios en una entrevista publicada en el último número de la revista Rolling Stone, en la que afirma que no se encuentra con ganas de seguir adelante.

"Estoy acabado, en cierto sentido, porque siento que no me apetece hacer nada ahora mismo", aseguró el artista de 80 años en un artículo titulado "El largo adiós de Little Richard", firmado por el periodista Neil Strauss y acompañado por una fotografía en blanco y negro del músico, en la que aparece relajado y con cara de satisfacción.

Aquejado por una fuerte ciática y unos problemas degenerativos en la cadera, Richard Wayne Penniman -su nombre real- ha visto cómo su salud le ha obligado a reducir paulatinamente el número de conciertos que es capaz de ofrecer, en los que admite que no siempre era capaz de rendir a la altura de su nombre.

El punto de inflexión, según relata el texto, llegó en junio del año pasado, cuando se vio obligado a detener un show en Washington y dijo al público: "Jesús, por favor ayúdame. Apenas puedo respirar. Es horrible".

"Tengo dolores las 24 horas del día. Estoy enfermo", aseguró antes de que le ayudaran a abandonar el escenario. Aquella fue una de las pocas actuaciones que ha realizado en los últimos cinco años.

Se recuperó y apareció en el festival Viva Las Vegas Rockabilly del pasado mes de abril, pero su salud ha empeorado desde entonces, así que ahora pasa su tiempo diseñando ropa, rezando y reflexionando sobre su legado.

"Cuando comencé en este negocio, no existía el rock ''n'' roll. Estaba el swing and sway con Sammy Kaye. Estaba John Lee Hooker, Elmore James y, después, Chuck Berry. Pero cuando empecé con ''Tutti Frutti'', ahí es cuando el rock golpeó de verdad, con el wop-bob-a-loo-bop-a-lop-bam-boom", aseveró en alusión al onomatopéyico comienzo de esa célebre canción.

"Cuando veo a la gente de hoy día, no lo saben", afirmó Richard, quien se ve a sí mismo como el "Arquitecto y Creador del Rock".

"Soy el quásar del rock. Había otro tipo en Atlanta, Billy Wright, pero yo lo comencé", declaró.

Richard sostiene en la entrevista que su música siempre nació a partir de sensaciones propias.

"Mi madre tuvo 12 hijos. A mi padre lo mataron con 40 años. Mi mejor amigo mató a mi padre. Mi madre necesitó ayuda. Fue muy doloroso, pero también hubo mucho amor. El dolor no era tal. Era el dolor del amor. Siempre quise expresar ambos sentimientos", comentó.

Ganador de un Grammy a su trayectoria y miembro del Salón de la Fama de los Compositores y del Rock and Roll, su presencia revolucionó la escena musical de la década de 1950 y resultó fundamental en los comienzos de géneros como el soul y el funk.

Natural de Macon (Georgia), fue el creador de auténticos himnos como "Tutti Frutti", "Good Golly, Miss Molly", "Long Tall Sally" y muchos otros.

Elvis Presley, Buddy Holly, James Brown, Quincy Jones, David Bowie y los mismísimos Beatles y Rolling Stones han reconocido la influencia de Little Richard, uno de los primeros artistas de color que supo combinar con éxito el "rythm and blues" genuinamente negro con los sonidos "pop" del mercado blanco estadounidense.

Su último trabajo de estudio fue "Shake It All About", en 1992.