El Cabildo de Tenerife es la primera administración pública de Canarias que ha aprobado un plan de preparación y respuesta frente a la pandemia de gripe A. El objetivo del citado documento, aprobado en Consejo de Gobierno el pasado día 20 de julio, es el de limitar o paliar el impacto de la pandemia generada por el virus AH1N1 a nivel mundial en los 6.000 empleados adscritos a la Administración insular y en la consecuente prestación del servicio público, adaptando, si es preciso, su funcionamiento. Además, este primer plan acordado por una administración pública en el Archipiélago ha sido solicitado por el Gobierno de Canarias como modelo a seguir y ya se ha facilitado a los cabildos de La Palma, El Hierro y Gran Canaria.

La consejera insular de Recursos Humanos y Defensa Jurídica y coordinadora del citado plan, Rosa Baena, ha destacado la participación de la Unidad de Prevención de Riesgos Laborales del Cabildo de Tenerife en un documento que pretende garantizar la atención al ciudadano de los servicios públicos ante las posibles consecuencias de la pandemia. Cabe recordar que, según declararon las autoridades sanitarias, existe una previsión de hasta un 40% de bajas laborales entre la población activa, lo que llevado a los 6.000 empleados que tiene el Cabildo con sus organismos autónomos y empresas públicas podría derivarse hacia un hipotético techo de 2.400 bajas por gripe A. Si bien es cierto que, hasta el momento, el servicio de Recursos Humanos de la Institución insular no tiene constancia de ninguna baja laboral por esta enfermedad.

Si esos índices de bajas laborales se produjesen en el Cabildo habría que desarrollar un protocolo de actuación que es el que ya se ha determinado, una vez fueron valoradas las medidas sanitarias propuestas por la Unidad de Salud Laboral. Este instrumento, bajo la dirección de un equipo coordinador, se extiende, además, como modelo a los organismos autónomos y empresas participadas por el Cabildo.

De los 42 servicios de la Corporación insular, los protocolos de actuación aprobados establecen que las nueve oficinas de atención al ciudadano (repartidas a lo largo de la Isla) y las áreas de Medio Ambiente y Carreteras deberán contar con sistemas de sustitución en caso de que cuenten con altos niveles de baja por situaciones de incapacidad temporal derivadas de casos de gripe A.

Estos servicios son concebidos como esenciales según el Real Decreto que establece las funciones de ineludible atención dentro de los servicios públicos y su personal deberá ser sustituido, ya sea por acumulación de funciones en otros empleados públicos o acudiendo a listas de reserva cuando no fuera posible, que deberán conformarse con los criterios de concurrencia, publicidad y participación.

Asimismo, la serie de medidas sanitarias que aprobó el Consejo de Gobierno requerían el acopio de geles, fármacos y mascarillas para disponer de un botiquín de salud laboral más amplio por lo que se aprobó una partida de 12.000 euros.

Por último, entre las medidas de prevención propuestas se encuentra el traslado de las instalaciones sanitarias al área de triage, un habitáculo preparado con las medidas sanitarias adecuadas para tratar a trabajadores con síntomas de gripe A. Este área estará separada del resto del Cabildo y tendrá un acceso independiente desde la calle para evitar mayor riesgo de contagio.