La negociación entre Transportes Interurbanos de Tenerife, SA (Titsa) y su comité de empresa se desbloqueó durante la madrugada del martes. En esa penúltima reunión fue cuando la compañía puso sobre la mesa el listado con los nombres de los 117 trabajadores que serían despedidos a partir de ayer en aplicación del expediente de regulación de empleo presentado el 10 de abril. En ese momento fue cuando la parte minoritaria del comité de empresa tomó conciencia de que el ERE se iba a aplicar.

Fuentes sindicales y de la empresa confirmaron ayer este extremo y explicaron que el acuerdo en Titsa que evitó esos despidos estuvo en peligro como consecuencia de las discrepancias en el seno del comité de empresa, especialmente por parte de la Unión General de Trabajadores (UGT) en el sector del transporte urbano.

Cabe recordar que el acuerdo final fue suscrito solo por Titsa e Intersindical Canaria (IC), el sindicato mayoritario en el comité de empresa, especialmente tras la implantación del convenio único, que implica también la del comité, pasando de tener uno en el sector interurbano y otro en el urbano, donde UGT contaba con mayoría.

En esa línea se pronunció ayer el director insular de Movilidad, Manuel Ortega, quien vinculó los problemas fundamentales habidos en la negociación a la pérdida de poder de UGT en el comité de empresa. "UGT queda fuera del convenio urbano, que desaparece, y pierde esa posición predominante. Esto influye y para ellos este hecho es determinante", explicó.

Este sindicato trasladará su oposición a la unificación del convenio a la vía judicial.

En declaraciones a ABC.Radio Tenerife, Ortega desmintió que el plan de ajuste en Titsa obedece a que "se trata de enjuagar el déficit del tranvía", entre otras cosas, porque ese déficit no existe. "Estoy satisfecho de que el 93% de los trabajadores que asistieron a la asamblea respaldaran el acuerdo que nos permite la viabilidad de la empresa" ya que con las medidas aprobadas se producirá un ahorro de 4,5 millones de euros en el coste laboral.

"La nueva ley impide que la compañía tenga déficit y si no hacemos nada, Titsa tendría que disolverse en año y medio. Nosotros no podíamos permitirlo", añadió el director insular.

Manuel Ortega aclaró que el Cabildo destina 45 millones de euros a la empresa de guaguas "por todos los conceptos", mientras que a Metropolitano le aporta 10 millones de euros.

Asimismo, el director insular de Movilidad defendió la reordenación de las líneas urbanas en Santa Cruz y dijo que "la presión vecinal no nos permite, muchas veces, tomar decisiones racionales y de forma racional".