Dos personas salvaron su vida la semana pasada en la capitalina playa de Las Teresitas tras sufrir un semiahogamiento gracias a la labor de los voluntarios de Protección Civil, quienes velan por la seguridad de los usuarios de este lugar durante diez horas diarias.
Así, cerca de quince personas, entre coordinadores y personal de vigilancia, de Protección Civil, junto a funcionarios públicos de Policía Local de Santa Cruz llegan a la citada playa a las 9:00 horas para realizar su labor de forma continua hasta las 19:00 horas, explica Adasat Alonso, coordinador de Protección Civil en Las Teresitas.
Todos los voluntarios poseen formación. "Algunos son socorristas acuáticos con titulación, y los coordinadores son técnicos en emergencias sanitarias de formación profesional, diplomados en enfermería y socorristas acuáticos", destaca Alonso.
Estos profesionales, cuyas edades comprenden desde los 20 hasta los 40 años, están repartidos por toda la playa. "Tenemos una patrulla desde el acceso 1 hasta el 5; otra de este último en adelante y la última está sentada delante de Cruz Roja controlando la playa con prismáticos.
"Además, recorremos la playa a pie para estar pendientes de cualquier incidencia que pueda ocurrir", explica el coordinador, quien señala que los voluntarios trabajan en colaboración directa con los agentes de la Policía Local que están en la playa".
Y es que "uno no se puede despistar en ningún momento de la playa, porque donde menos te lo esperas puede pasar cualquier incidente", destaca Adasat Alonso.
Los principales servicios para los que son requeridos son "picaduras de medusas, abejas y avispas, bajadas de tensión, crisis de ansiedad, ayudar a gente con problemas a bañarse y búsqueda de niños perdidos", así como recomendaciones a los usuarios de Las Teresitas.
En cuanto a los ahogamientos, "son poco frecuentes en esta playa", aunque en ocasiones se dan casos, como los dos ocurridos la semana pasada.
Sobre el comportamiento de los usuarios de la playa, Alonso destaca que las personas mayores suelen ser las que realizan un baño más responsable.
Pese a que su labor quizás no sea tan reconocida como merece, estos profesionales, que realizan su trabajo de forma vocacional y se enfrentan a la "temporada alta" de la playa, suelen realizar, según el día, entre cinco y doce servicios de media.