LA DECISIÓN unilateral del Gobierno del PP de obligar a los canarios a obtener el certificado de residencia para poder acceder al descuento en los billetes de avión o barco se suma ahora al conjunto de normas que está imponiendo el Gobierno del Partido Popular sin tener en cuenta la opinión de los principales afectados. Pero estas medidas resultan aún más incoherentes cuando se ponen en marcha sin considerar siquiera las posturas adoptadas por sus propios compañeros de partido que el pasado 4 de mayo aprobaron en el Parlamento de Canarias la propuesta de CC de instar al Estado a que mantuviera el sistema de acreditación mediante la presentación del DNI.

Esta norma, que se escuda en la necesidad de acabar con un presunto fraude que no han podido demostrar y que se atribuye injustamente a los canarios, ha levantado en apenas diez días desde su aplicación duras críticas por parte de quienes ven en ella un retroceso en plena era tecnológica. Las largas colas que hemos podido ver estos días en las oficinas municipales contrastan con el proceso de simplificación administrativa al que aspira cualquier sociedad moderna y ponen de manifiesto la falta de sensibilidad de quienes han tomado esta decisión sin tener en cuenta nuestras necesidades.

Resulta paradójico que hace quince años no opinaran lo mismo y fuera el mismo Partido Popular el que decidiera dar por válida la presentación del DNI para justificar la residencia, a propuesta de Coalición Canaria. Pero eran otros tiempos, era el primer gobierno de Aznar y necesitaba el apoyo de CC para sacar adelante muchas de sus iniciativas. De ahí quizás esa especial atención a los temas canarios. Ahora todo les resulta más fácil, las decisiones se toman de manera unilateral y por el camino más corto. Que "creemos" que los canarios cometen irregularidades a la hora de acreditar su residencia..., pues se les ponen más trabas para que viajen menos.

Esta no es la solución. Si existe ese supuesto fraude, que se investigue y se estudien fórmulas más sencillas para castigar a quienes lo comenten y no al conjunto de los ciudadanos canarios, que por múltiples razones tenemos que salir de la isla de la única manera posible. Mientras que para los peninsulares viajar en avión o barco es una opción más y, en ocasiones, un tanto excepcional, para nosotros es algo cotidiano, sobre todo en el caso de los traslados entre islas.

Cabe por último preguntarnos qué postura defienden los senadores y diputados canarios que militan en el Partido Popular; la que aprueban sus compañeros en el Parlamento de Canarias o la que decide el señor Rajoy y sus ministros, aun en contra de los intereses de los canarios. Quizás necesitan tomar aire en el momento de la votación.

@carlosislatener