El director territorial de CaixaBank, Andrés Orozco, ayer llevó un discurso optimista a un salón lleno de empresarios que se mostraron entre escépticos y frustrados con la banca. El inicio de la recuperación, anunció, tendrá lugar a finales de este año. El próximo ejercicio será "claramente" de mejoría tras haber sorteado la economía un 2012 que calificó como "posiblemente, el peor de la crisis".

La previsión de la entidad financiera coincide con otras como la de la patronal tinerfeña, que hace dos semanas también fijó en el último trimestre de este año el comienzo de una recuperación que auguró lenta.

Orozco hizo el anuncio en compañía del delegado general de la entidad, David Cova, el presidente del Comité de Expertos para la Reforma de las Administraciones en Canarias, José Luis Rivero Ceballos, y el director general de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, Vicente Dorta, institución que organiza el foro "Perspectivas económicas de Canarias 2013 y propuestas de medidas" en el transcurso de la primera de las jornadas.

Mientras Ceballos abordó en una conferencia la reforma administrativa en el Archipiélago, Orozco y Cova hablaron sobre la "normalización" del sistema financiero en una ponencia en la que explicaron qué le pasó a la banca, por qué recibió las ayuda que tuvo en 2012 y en qué situación se encuentra ahora antes de augurar cuándo cambiará el ciclo económico.

Con empatía, Orozco respondió a todos los planteamientos y preguntas de un aforo crítico con el desempeño de la banca en los últimos años. Se mostró comprensivo con el disgusto de los empresarios y de los autónomos al tiempo que explicó que la banca tampoco atraviesa un buen momento. De hecho, afirmó que el beneficio de las entidades financieras ha retrocedido del 2,1% que registró en 2009 al 1,1% del año pasado, situación que "obliga" a los bancos a subir el interés de los préstamos que ofrece a las pymes. De lo contrario, les resultaría "inviable".

¿Por qué ha bajado la rentabilidad? Por una parte, explicó, la morosidad es un grave problema. En buena medida proviene de la apuesta de los bancos por los préstamos para la construcción en los años del "boom" inmobiliario, actividad que se ha visto afectada de forma particular por la crisis.

A consecuencia de la morosidad, añadió, los bancos tienen que aumentar el nivel de capitalización y ambos fenómenos ocurren de forma simultánea. Además, la mayoría de los préstamos hipotecarios están referenciados al euríbor, que al haber bajado en los últimos años, restringe mucho el margen de la banca.

Los empresarios, en todo caso, criticaron que mientras llega la recuperación anunciada para finales de año, el acceso al crédito es cada vez más difícil y, de conseguirse, se obtiene a un precio prohibitivo, por lo que el director territorial de CaixaBank explicó que la banca se ve forzada a ajustar los tipos de interés ante la aminoración de sus márgenes al tiempo que anunció una atención "personalizada y especializada" para las pymes.