Lucía Luisa Ramos Vaquero, que fuera reina del Carnaval de Santa Cruz de Tenerife en 1984 y en los últimos años miembro del equipo de dirección encargada de las aspirantes al cetro; y Montse Perdomo y Ana Santacreu, del departamento de producción del Organismo Autónomo de Fiestas, declaran esta mañana ante la jueza que instruye el caso Saida y su testimonio será de vital importancia para aclarar los detalles sobre la solicitud que realizó el diseñador Willy Jorge para usar fuegos en su traje.

En su declaración, el que fuera director gerente de Fiestas, Fran Trujillo, admitió que Willy Jorge había solicitado permiso a Fiestas para usar fuegos en su traje. Después de reconocer que la petición se había realizado ya fuera de plazo, a menos de una semana para la celebración de la gala, Fran Trujillo admitió que tramitó la solicitud en aras del espectáculo. De lo dicho por Trujillo quedó claro que dio la aprobación al uso del fuego en el traje, tal y como permitían las bases, pero no reconoce que se le autorizara, pues se le comunicó, siempre según el que fuera director gerente, pero no se tuvo la confirmación de parte de Willy Jorge sobre si había recibido la autorización por escrito. Por esta razón, el testimonio del personal de Fiestas será fundamental para aclarar cómo la organización le comunicó a Willy Jorge si tenía permiso para usar fuegos y, en particular, si los podía utilizar o no. Además, la declaración de Lucía Luisa Ramos Vaquero, miembro del equipo de dirección de la gala, permitirá conocer si el responsable del espectáculo, que también declarará ante la magistrada mañana, tenía constancia de que un traje llevaba fuegos y hasta incluso por qué había una escaleta que lo reflejaba.

Hoy y mañana concluirá el segundo bloque de declaraciones ante la jueza que se inició después de verano. Cabe recordar que la semana pasada ofreció su versión el vendedor de la tienda Fireworks Tenerife, donde un miembro del equipo de Willy Jorge acudió a comprar los fuegos.

Según consta en su declaración, José Agustín Rodríguez Hernández, el propietario de la tienda, aseguró que los fuegos que le pedían para el traje era un producto pirotécnico y que "era un disparate" cómo lo querían utilizar (en un traje de reina y en un recinto cerrado). "Es inflamable y tiene que guardar una distancia". Aseguró que "normalmente el fuego frío se usa en espectáculos con ventilación", y puso como ejemplo que en 2010 se utilizó en Tacoronte al aire libre. Fue la última vez cuando lo vendió hasta que acudió Willy Jorge.

Según dijo el vendedor del fuego, cuando ha utilizado este producto en desfiles de trajes de novias lo ha hecho con una distancia adecuada en el escenario o pasarela, que podría ser de entre 4 o 5 metros. Un vídeo de promoción que estaba colocado en la página web de Fireworks Tenerife muestra cómo se utilizaron los fuegos precisamente en el recinto ferial de la capital tinerfeña, precisamente en el enclave donde se celebró la gala de la reina en el Carnaval 2013, con la salvedad de que se desarrolló en la parte baja de la nave central. Se trata de una edición anterior de Feboda, en la que queda de manifiesto la distancia con la que se tiraban los fuegos mientras desfilaban las novias. En el archivo QR que se adjunta en página se puede verificar.

Después de que vendedor y comprador declararan ante la jueza el lunes de la semana pasada, prestaron su testimonio un técnico de sonido de la empresa Sonoplus Canarias, José Luis de la Rosa, y un regidor de la trasera del escenario, Carlos Ubay Gómez. Ambos aseguraron que Magnolia estaba situada dentro del traje cuando se accionó el dispositivo, aunque no precisaban si iba amarrada o no. También se aseguró que el equipo de la candidata que llevó en su traje los fuegos acudió en auxilio de Saida Prieto, la aspirante que resultó herida en el 60% de su cuerpo con heridas de segundo y tercer grado a consecuencia del fuego que se prendió por accidente de uno de los dos cañones del traje que vestía Magnolia, una creación de Willy Jorge.

El regidor de la trasera de escenario declaró la semana pasada que ni Lucía Luisa ni Juan Carlos Armas le dieron ninguna indicación en materia de seguridad, además de precisar que no asistió a ninguna reunión sobre el plan de protección, seguridad y protocolo en caso de accidente. El propio regidor admite que se dirigió, cuando ocurrieron los hechos y por orden de la dirección por interfono, a retirar la batería situada en el anclaje de la espalda de la candidata y, "por indicación de un hombre con indicativo rojo", desconectó el cañón que estaba accionado y sin tela.

Un vídeo de cámaras de seguridad del recinto ferial muestra cómo Willy Jorge a las 21:56 horas lleva el traje a la baliza para que el notario verifique las medidas. Ya entonces tenía los fuegos en los cañones. A las 22:19 horas Magnolia se queda en la trasera de escenario y un minuto después, a las 22:20 horas, se produce el incendio, con lo que no queda claro si estaba dentro del traje cuando surgió el fuego.