El déficit de explotación del Matadero Insular asciende a un millón y medio de euros. La aplicación del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que la empresa mixta aplicará implicará el despido de 12 de los 42 trabajadores de la plantilla. A pesar de prescindir de casi el 29% de los empleados, la sociedad mantendrá un millón de euros de déficit.
Así lo aseguró el consejero insular de Agricultura, Ganadería y Pesca del Cabildo, José Joaquín Bethencourt, quien también explicó que urge adoptar medidas que permitan reflotar esta industria "dada la importancia que tiene para la Isla", ya que se trata de la única empresa autorizada para el sacrificio de animales destinados al consumo humano.
Entre esas otras medidas se incluye una reducción salarial transitoria (durante año y medio) que alcanzaría hasta el 20% de la nómina de la plantilla. "Con eso y alguna otra medida, el ahorro será de medio millón de euros".
Entre esas otras medidas Bethencourt señala "la necesidad de convertirnos en interlocutores para que la carne del país llegue a las grandes superficies, donde hoy es casi testimonial. Con el mercado tradicional no seremos capaces de corregir la situación".
A su juicio, también se precisa una nueva revisión de las tarifas. "Los costes del Matadero duplican las tarifas. Por ejemplo, sacrificar al animal cuesta 40 céntimos por kilo y se repercuten solo 20; eso demuestra que la estructura es insostenible", añadió.
Otro aspecto a mejorar es la distribución. "No somos competitivos y debemos recuperar el modelo inicial externalizando ese servicio de forma que el coste se repercutirá directamente a los ganaderos".
Otro aspecto por el que aboga José Joaquín Bethencourt es reducir la actividad de forma que la instalación preste sus servicio cuatro días en lugar de cinco a la semana.
Con todo ello, el consejero entiende que se puede avanzar en una solución para la situación económica del Matadero. Sin embargo, los conflictos continúan. La plantilla presentó ayer otro preaviso de huelga debido a que no han cobrado el salario de octubre, algo que se produce reiteradamente. De esta forma, los trabajadores pararán indefinidamente a partir del martes de la semana próxima. Cuando cobren reanudarán el trabajo.
Los empleados de esta empresa, de la que el Cabildo de Tenerife tiene en torno al 30% del accionariado, pasarán a cobrar salarios que oscilarán entre 700 y 800 euros al mes durante el año y medio que dure el ERTE.