"No se trata de voluntad política. Por encima del empeño de los responsables políticos de que carrozas y coches engalanados salgan al Carnaval como cada año hay una ley que hay que cumplir, y que no es una potestad política, sino una norma que hay que cumplir. Saltarse las normas de seguridad sería como que la policía autorice circular sin cinturón de seguridad porque es incómodo porque llevan disfraz". De esta forma, fuentes municipales insisten en la necesidad de que la participación de las carrozas y los coches engalanados se ajuste a la legalidad.
Con este horizonte, los carroceros ha sido convocados a una reunión que se celebrará esta mañana, a las 11:00 horas, antes de que el alcalde de la capital reciba a las aspirantes adultas.
En la reunión se plantearán las diferentes opciones que ya avanzaron los carroceros con el gerente de Fiestas, encuentro en el que no estuvo ni el edil de Fiestas ni el responsable de Seguridad.
Los carroceros son optimistas porque tienen el convencimiento de que la organización ha dado marcha atrás y admite que no podrá exigir la ITV o que estén dados de alta por la propia condición del vehículo, que son modificados, más allá de que la exigencia de esa cláusula se incorporara cuando el plazo de inscripción estaba cerrado.
Partiendo de la máxima de que Fiestas admite carrozas sin ITV, ahora la fórmula es ver cómo y dónde. Como contrapartida a estar dado de alta en Tráfico, la organización exige a los participantes un seguro de responsabilidad obligatoria. A partir de ahí, se buscan alternativas para ver cómo participan. Las opciones van desde vallar incluso el recorrido de la propia cabalgata anunciadora, que podría ser similar al coso, salvo en viernes, y vallarlo al completo para impedir la entrada al recinto. Otra posibilidad, que discurra por el trayecto habitual y las carrozas entren a su paso por la avenida de Anaga, sin descartar que sean arrastradas por un chuto o cabeza tractora, que rechazan los carroceros. Hoy, día decisivo.