El Ayuntamiento de Tegueste ha acordado apoyar la campaña de las Naciones Unidas para la reducción de desastres, el desarrollo de ciudades resilientes y la reducción del riesgo urbano. De esta manera el municipio, a través de una moción aprobada recientemente en pleno, formará parte de esta campaña, lo que se traduce en que Tegueste buscará aumentar y perfeccionar su capacidad de resiliencia, y que se encuentre, por tanto, capacitado para abordar de manera organizada y con coordinación cualquier desastre tanto climático como de cualquier otro aspecto que pueda surgir y afectar al desarrollo municipal.
La inclusión de la Villa teguestera en la “Campaña de Ciudades Resilientes” llevará consigo la implantación y verificación de diversos aspectos relacionados con la seguridad y los Planes de Emergencia, adaptando el municipio gracias a planes de evaluación del riesgo, la creación de infraestructuras que reduzcan el peligro, la evaluación de la seguridad de todas las escuelas y planteles de salud, programas educativos y de capacitación en relación a la materia, la protección de los ecosistemas y las zonas naturales de amortiguamiento o la previsión de sistemas de alerta temprana y la capacitación para la gestión de las emergencias.
En esta línea, de cara a lograr esta condición, el municipio pretende realizar todas las labores necesarias contando con la participación de diversas instituciones y organismos como el Gobierno de Canarias a través de la Dirección General de Seguridad y Emergencias, la Universidad de La Laguna, la FECAI y la FECAM.
Este nuevo concepto ya utilizado en los foros internacionales, la resiliencia, se fundamenta en la capacidad que poseen las administraciones locales para reducir riesgos ante cualquier desastre.
El aumento de la resiliencia de las naciones y comunidades ante los desastres fue tratado en la Conferencia Mundial sobre la Reducción de los Desastres que se celebró en Japón en 2005, dónde se aprobó el Marco de Acción para el 2005-2015. Fue justo en esta Conferencia donde se constituyó una oportunidad excepcional para promover un enfoque estratégico y sistemático de reducción de la vulnerabilidad a las amenazas y los riesgos posibles tanto en la esfera internacional y regional como en los planos nacionales y locales.