La familia de Francisco López Sanluis, el hombre de 91 años que el pasado domingo falleció supuestamente tras abrir una puerta de emergencia y caer por unas escaleras con su silla de ruedas, sentía ayer "indignación e impotencia al ver estas injusticias".

Una de las hijas del nonagenario palmero, Carmen Pilar López, manifestó que "no es fácil aceptar esta situación" y que espera, con el paso de los días, "ser más objetiva".

Dicha mujer aseguró que "todavía no tenemos el informe judicial sobre las causas de la muerte".

Reconoce que acudió en días pasados al Instituto de Medicina Legal de Santa Cruz de Tenerife, pero el personal de dicho organismo le explicó que debía pedirlo a través del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 1 de Icod de los Vinos.

Carmen Pilar López explicó que personal del centro sociosanitario donde ocurrió el hecho acudió al tanatorio a darles el pésame.

Cabe recordar que el cadáver de Francisco López permaneció en el Tanatorio Servisa el pasado lunes y el martes. Su hija señala que la puerta por donde accedió su padre hasta las escaleras la "he visto muchas veces abierta". Añadió que "hemos visto también empujar a varios mayores en sillas de rueda en una única fila desde el comedor hasta la entrada a las habitaciones". Y atribuyó estas situaciones a que supuestamente puede existir falta de personal.

Carmen Pilar López recordó que las personas mayores necesitan "mucho respeto y amor en sus últimos años". Señaló que "a mis padres los he encontrado algunas veces con la lengua deshidratada por falta de agua". Desde su punto de vista, "cree que no es un problema de dinero, sino de falta de valores humanos y conciencia".

Ayer también habló una amiga de la familia. Dicha persona cree necesaria la apertura de una investigación interna sobre lo que ha ocurrido y poner todos los medios de prevención adecuados "para que esto no vuelva a ocurrir". Esta mujer, que también es una profesional de la medicina, manifestó que "está claro que algo ha fallado". Además, recordó la importancia de garantizar la seguridad en cualquier centro sanitario o sociosanitario, independientemente de que sea público o privado. Consideró necesario que los familiares del fallecido reciban "información veraz y transparente, más allá de los datos que incluya el informe" del Equipo de la Policía Judicial de la Guardia Civil del Puerto de la Cruz.

Y apuntó que esa información debe aportarse "lo antes posible" por parte de los responsables del centro geriátrico donde estaba la víctima, que depende del Instituto de Atención Social y Sociosanitaria (IASS) del Cabildo, pero que está gestionado por la empresa Aeromédica.

Por su parte, el vicepresidente del Cabildo en materia sanitaria, Aurelio Abreu, dijo ayer en la Cadena SER que el suceso fue un "desgraciado accidente", y lanzó un "mensaje de tranquilidad" a los familiares de residentes en el centro porque las instalaciones "cumplen todos los requisitos que marca la ley".

Abreu señaló que la persona fallecida podía moverse por el centro, y pidió "prudencia" y esperar por las conclusiones de la investigación abierta por la Guardia Civil para que los hechos se aclaren "lo antes posible".

Mientras tanto, Aeromédica declinó hacer declaraciones porque el asunto está judicializado.

"No tenía fuerzas para abrir la puerta"

Carmen Pilar López explicó ayer a EL DÍA que, "desde mi punto de vista, mi padre no tenía fuerzas suficientes para abrir la puerta de emergencia" en una de las dos plantas de la residencia geriátrica gestionada por Aeromédica, ya que la tercera es administrada directamente por el IASS.

Hasta ahora, algunos de los pocos datos que tiene la familia son que Francisco López Sanluis sufrió un fuerte traumatismo craneal tras caer con su silla de ruedas desde 1,60 metros de altura. La mencionada hija del fallecido explicó que su padre tenía una "plaza de alto requerimiento". Curiosamente, Carmen Pilar estuvo el pasado domingo en la residencia sociosanitaria del Hospital del Norte, en el municipio de Icod de los Vinos. Ese día celebraron el cumpleaños de su madre, que permanece en la misma residencia donde vivía el fallecido.

Carmen Pilar recuerda que estuvo con ellos durante varias horas, en las que les habló y los aseó. Recuerda que abandonó las instalaciones a las 17:00 horas aproximadamente. Y a las 22:00 horas la avisaron de que su padre había sufrido un accidente.

El entierro de Francisco López Sanluis se produjo a las 14:00 horas de ayer en el cementerio del municipio palmero de Puntagorda, de donde era natural. Francisco era conocido en La Palma por "Neno" y fue dueño del bar López de Puntagorda.

El comité de empresa del IASS considera que en el área sociosanitaria del Hospital del Norte faltan medidas de prevención para evitar estos sucesos. Y, según publicó ayer EL DÍA, hace precisamente un año ocurrió un caso similar en el Hospital Febles Campos de Santa Cruz, cuando un hombre mayor en silla de ruedas también se precipitó por unas escaleras y falleció. La directora de Atención a la Dependencia del IASS, Ángeles Narbona, negó que existan tales carencias de seguridad.