El consejero insular de Carreteras y Paisaje, el socialista José Luis Delgado, ya dispone oficialmente de “vía libre” para aplicar, sin ningún tipo de obstáculo, su propia metodología en la toma de decisiones y la gestión diaria del área.

Las diferencias de criterio que han mantenido Delgado y Ofelia Manjón –hasta ahora directora insular de Carreteras y que ha pasado a ocupar idéntico cargo, pero en el área de Turismo y Desarrollo de Proyectos Estratégicos– representaban un secreto a voces y, en cierta manera, amenazaban con romper el frágil equilibrio de un departamento que se considera estratégico y que estaba regido por una tortuosa bicefalia.

“Las directrices tienen que ser precisas y venir de una sola voz”, subraya José Luis Delgado.

En este complejo y peligroso escenario, el presidente Carlos Alonso ha mostrado su habilidad. Primero, planteando la propuesta de la modificación puntual de la estructura y composición orgánica de determinadas áreas –aprobada por acuerdos plenarios de 27 de septiembre de 2013 y 28 de enero de 2014-, y, después, llevando al pleno del pasado 27 de junio el expediente que sancionaba los cambios, aprobado por los votos de nacionalistas y socialistas, con la abstención de los integrantes del Grupo del Partido Popular (PP).

A estos cambios, que se hicieron efectivos desde el 1 de julio, se sumó la propuesta elevada a la consideración del Pleno el pasado 25 de julio sobre la modificación del régimen de dedicación parcial del consejero, que desde ahora brindará disponibilidad absoluta a los asuntos relativos a su área de Gobierno, al menos durante cuatro días a la semana.

“El presidente quería que mi dedicación fuera exclusiva, al cien por cien, pero no soy una persona que quiera depender de la política”, porque José Luis Delgado, además de un servidor de la cosa pública, se considera “un profesional” que debe velar por el buen desarrollo de su empresa.

En su afán por “construir”, el consejero destaca que su propósito no es otro que “devolverle al área la operatividad que precisa”, en relación con esa importancia que a su juicio representa un departamento tan operativo.

“Mi objetivo prioritario es poder sacar adelante el mayor número posible de proyectos” y hacerlo, además, desde criterios de efectividad y “con un norte muy claro en cuanto a la gestión”, detalla, con “la máxima transparencia en las actuaciones; licitando los proyectos en tiempo y forma; generando puestos de trabajo; creando tejido con las empresas locales, y eso solo es posible conseguirlo sin ningún tipo de distracciones”.

En el momento de esta conversación, José Luis Delgado estaba enfrascado en distintos proyectos de jardinería y mejora paisajística, en lograr “rentabilidad y productividad”, en ser eficientes pero con una sola voz.