El malestar de la memoria se remonta, al menos, hasta el año 2007. Ya desde entonces, y ha llovido sobre mojado, los residentes del municipio de El Rosario han soportado con una infinita paciencia cómo los diferentes gobiernos hacían oídos sordos a sus demandas sobre el mal estado de la conocida popularmente como carretera de La Esperanza.

Los vecinos, que se sienten abandonados, han solicitado reiteradamente el arreglo de una vía que consideran vital, una carretera de enorme valor para la promoción y la imagen turística de la Isla -no en vano conecta el área metropolitana con el Parque Nacional del Teide- y que se convierte a diario un tortuoso camino de cabras, aunque más ancho, con un evidente peligro para la integridad de los automovilistas.

Hasta cinco acuerdos plenarios, adoptados por unanimidad en el Ayuntamiento de El Rosario, han instado repetidamente al Cabildo para que actúe de manera decidida en una carretera de competencia insular. Pero hasta ahora, todo han sido promesas.

Solo cuando se acercaba la fecha de celebración de las pasadas elecciones, en el año 2011, las palas y los operarios se pusieron manos a la obra. Pero la ilusión de los esperanceros duró el tiempo de observar cómo la actuación se limitaba al tramo comprendido entre Padre Anchieta y Los Baldíos, un ejemplo de discriminación.

En la nomenclatura de la red insular esta vía se define como la TF-24, que arranca desde el enlace de Padre Anchieta en la ciudad de San Cristóbal de La Laguna hasta El Portillo, y la utilizan los vecinos de El Rosario, pero también quienes se dirigen con sus vehículos desde el área metropolitana hacia el monte de La Esperanza, el área de Las Raíces o ponen rumbo al Parque Nacional del Teide.

Precisamente en una conservación este lunes a través de las redes sociales, concretamente mediante Tweeter, el presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, confirmaba al concejal y portavoz de IR-Verdes en el municipio de El Rosario, Escolástico Gil, que el Consejo de Gobierno había aprobado el pasado 16 de junio el proyecto del reasfaltado de esta vía y que se estaba tramitando la contratación de obras.

La solución a las demandas de los esperanceros parece que ya marcha por el buen camino.

Delgado: "Una realidad antes de final de mes"

El consejero de Carreteras y Paisaje del Cabildo de Tenerife, el socialista José Luis Delgado, mantiene su firme compromiso con los vecinos del municipio de El Rosario y, en este sentido, sostiene que la obra de la carretera TF-24 estará culminada antes de final de este mes, cumpliendo así con la palabra dada de acometer las obras de reasfaltado y acondicionamiento de la carretera de La Esperanza (TF-24), atendiendo una antigua demanda de la Corporación Local.

Los trabajos supondrán una inversión cercana a los 230.000 euros, con los que se repondrá el firme de la TF-2 en el término municipal de El Rosario hasta el punto kilométrico en el que se ubica El Portillo.

"Se trata del reasfaltado de una vía que soporta una gran intensidad de tráfico. Por esta razón decidimos que lo más apropiado era actuar en verano, cuando hay menor densidad de vehículos. En cinco días estará finalizada la actuación", aseguró Delgado.