Viajar o, al menos, desplazarse a un lugar nuevo nunca antes había sido tan sencillo. El uso del smartphone y la conexión a Internet han abierto un abanico de posibilidades que no tienen parangón si se echa una mirada al pasado. Google Maps ha sido uno de los artífices de este cambio radical en el que la tecnología hace la vida más sencilla. Una herramienta que continúa avanzando sobre todo en ofrecer al usuario la oportunidad de llegar a cualquier punto del mundo sin moverse de casa. Algo que suena a mágico pero que se hace posible gracias a la captación de millones de fotografías que son recogidas por un vehículo especializado que viaja alrededor del planeta.

Aunque no se puede emplear en todas las zonas de la Tierra -Asia y África son los continentes con menos trabajo realizado-, el coche que hace posible Google Street View, la herramienta del famoso buscador para hacer recorridos por las vías públicas, ya ha cubierto miles de kilómetros. Desde mediados de julio, se puede ver de nuevo a este vehículo, que no ha pasado inadvertido, por las calles de Santa Cruz de Tenerife y La Laguna. No solo por los colores vivos que posee ni por el inconfundible logo de la empresa estadounidense sino por el "gadget" que sobresale en el techo. Una esfera azul que guarda una decena de cámaras que captan todo lo que le rodea mientras se desplaza por las calles. El material fotografiado se une creando una vista de 360 grados que puede utilizar cualquier usuario con acceso a Internet.

Google asegura que el coche no es el único vehículo que utiliza para fotografiar el mundo y ofrecerlo a través de la red. Tal y como afirma la compañía californiana, para adentrarse en caminos más estrechos ha empleado desde una bicicleta a un carrito o, incluso, una moto de nieve. Todo ello para que Internet sea la pieza fundamental para disfrutar del más realista de los mapas que se pueden usar de forma digital.