La Asociación de Viticultores de Tenerife (Asviten) solicita al Cabildo de Tenerife que apruebe en Consejo de Gobierno o en el propio Pleno de la corporación, una propuesta en la que se inste al Gobierno de Canarias a ampliar el periodo de apertura de los ''guachinches'' --ahora mismo fijado en un máximo de cuatro meses-- debido al exceso de vino de los viticultores.

En declaraciones a Europa Press, el secretario, Valerio García, ha señalado que esta solicitud se le trasladó al exconsejero insular de Agricultura, José Joaquín Bethencourt, hace varias semanas, y espera que ahora la haga suya quien le ha relevado recientemente, Jesús Morales.

Según García, a los ''guachinches'' no les hace falta un "plan de promoción" sino seguir dando pasos para su legalización. En su opinión, desde que el año pasado entró en vigor el decreto regulador, son "establecimientos legales y generan empleo", y han dejado atrás la economía sumergida. "Ahora cotizan a la Seguridad Social y están contratando personal, es un filón para la economía de la isla", ha destacado.

No obstante, ha dicho que "el trabajo no está hecho", y emplaza a los políticos a permitir la apertura mientras haya vino en las bodegas y "divulgar e informar" para que los establecimientos que no estén legales se den de alta.

Por ello, García ve "conveniente" convocar una reunión con todas las partes implicadas en el decreto --viticultores, ayuntamientos, empresarios, Cabildo y Gobierno de Canarias-- para hacer un análisis de su primer año de vigencia, que para Asviten, "es muy positivo".

"Somos optimistas, es un proceso lento, se han legalizado bastantes ''guachinches'' y hay que seguir trabajando en la misma línea. Era una actividad alegal, y no se regula en dos días, es lento pero va por buen camino", comenta.

Según García, su "mayor problema" es que "les queda vino", y es una situación generalizada, aunque también pide al Cabildo que se incida en que solo pueda llamarse ''guachinche'' al establecimiento explotado por los propios viticultores, y no a los restaurantes que utilizan ese término por su tirón comercial.

Con todo, ha dicho que en muchas ocasiones se está "rizando el rizo" sobre la legalidad, y se pregunta incluso "cuántos bares y restaurantes no cumplen la normativa que les corresponde".

VE "DESCAFEINADO" EL CAMBIO EN LA CONSEJERÍA DE AGRICULTURA

"Un ''guachinche'' en suelo rústico, en el 90 por ciento de los casos, será un ''guachinche'' real, otra cosa es que esté legal o no, pero es muy difícil saberlo. ¿Cuándo vamos a cortarnos el pelo, le preguntamos al peluquero si está dado de alta como autónomo?", comenta.

Sobre el cambio de Bethencourt en la Consejería Insular de Agricultura, apunta que ha sido "descafeinado" y no tiene "sentido" a algo más de seis meses para las elecciones, salvo "intentar lavar la imagen del Cabildo".

"Para hacer este cambio, personalmente que lo hubiesen dejado como estaba. ¿Cuál ha sido el objetivo de Carlos Alonso con este cambio?, que no nos vendan la moto con que quieren relanzar el sector. ¿Es que hasta ahora se habían olvidado del sector?, los argumentos son muy pobres", apunta.