Desde el año 2010, el Cabildo reduce su deuda un 57% pasando de los 491.623.000 euros de ese ejercicio a los 212.757.000 que prevé al cierre del año próximo, periodo en el que destinará 30 millones a costear ese capítulo.

El presidente, Carlos Alonso, facilitó estos datos en el acto de la firma de la refinanciación de la deuda vinculada al pago a proveedores, que tuvo lugar ayer en el Palacio Insular. Con ello, el Cabildo se ahorrará 7,1 millones de euros en siete años al haber sido autorizado por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas a refinanciar la deuda adquirida por préstamos vinculados al pago a proveedores, que suponen un total de 45,5 millones de euros.

Alonso y representantes de CaixaBank, Banco de Sabadell y Cajamar-Caja Rural firmaron la operación de crédito correspondiente al haber cumplido la Corporación insular una serie de requisitos exigidos por el Estado para acogerse a esta medida excepcional.

Para Carlos Alonso, la "clave" para el crecimiento futuro de la Isla consiste en "reducir el endeudamiento y tener una Corporación saneada" y anunció que el próximo año el Cabildo no realizará nuevas operaciones de endeudamiento.

De igual modo, y dado que el Cabildo cumple con todos los supuestos establecidos por ley en relación con la estabilidad presupuestaria, el límite de deuda, la regla de gasto, el período medio de pago a proveedores (cifrado en 11 días) y la cancelación total de los préstamos vinculados al mecanismo de pago a proveedores, podrá dejar sin efecto el Plan de Ajuste, una vez que la propuesta sea aprobada por el Pleno de la Corporación insular en la sesión ordinaria de diciembre.

Ese Plan de Ajuste, aprobado por unanimidad en marzo de 2012, ha permitido al Cabildo adoptar una serie de medidas necesarias para poder cumplir con los requisitos establecidos por la ley en relación con la estabilidad presupuestaria, la racionalización y reestructuración del sector público empresarial, la reducción paulatina del endeudamiento y la sostenibilidad de los servicios públicos de forma que las medidas de ajuste no influyan en la calidad de los mismos.

Mientras la deuda del Estado y de las comunidades autónomas creció en el período 2008-2013 y la de las corporaciones locales se mantuvo, la evolución de la deuda del Cabildo de Tenerife "marca una importante reducción que supone que su peso en el conjunto de deuda de las corporaciones locales pase del 1,11% en 2010 al 0,75% en 2013".

"La deuda del Cabildo no era, no es ni será un problema para la Isla", sentenció el presidente de la corporación, quien anunció que esta administración incrementará la inversión durante el año próximo y que centrará el gasto "en las personas".