El Pleno del Ayuntamiento de La Laguna puso fin ayer a algo más de un mes de incertidumbre: José Alberto Díaz (CC) es el nuevo alcalde de La Laguna, con el apoyo de un PSOE fiel en el fondo, pero rebelde en las formas.

Las dudas sembradas apenas duraron unos segundos, aunque para algunos se hicieron eternos. Fueron los correspondientes al recuento de votos. La aparición de tres papeletas en blanco -XTF-Nueva Canarias-, cuando aún el candidato de CC no tenía su elección asegurada, despertaron algunos fantasmas tanto en el salón de plenos como en el anexo. Todo quedó en un susto.

Díaz fue elegido regidor del Ayuntamiento lagunero, ante los ojos de su predecesor, Fernando Clavijo, con los votos de sus compañeros de partido y con los cinco del PSOE. Un grupo de gobierno sin mayoría, de momento. El resto de formaciones, salvo los citados ediles de XTF-NC, optaron por votar a sus respectivos candidatos.

Y si la negociación del acuerdo de gobernabilidad entre CC y PSOE -con imposiciones de por medio- ha sido dura, larga y compleja, no parece que vaya a ser distinto el mandato que le espera al nuevo alcalde de La Laguna.

Sirva como ejemplo la intervención del que será el socio de Díaz por "imposición", Javier Abreu. "Debe asumir que los tiempos han cambiado para que el mandato en el consistorio se desarrolle bien y correcto", advirtió el líder del PSOE al regidor lagunero, al que también le dijo que el apoyo socialista no era "un cheque en blanco".

Y no quedó ahí su advertencia. "Los concejales del PSOE van a responder ante cualquier ataque que venga desde fuera del municipio a los legítimos representantes, independientemente de la formación política de la que sean los ediles afectados", añadió. "Deberá hacerle entender a su partido (CC) que la política no se hace con discursos y entrevistas, atacando a sus adversarios políticos", sentenció.

Díaz, por su parte, dejó su "mano tendida" al diálogo y al consenso en la nueva corporación, asegurando que será el "alcalde de todos". "Escucharé las mejores ofertas para el interés general. No hay otro modo de hacer la gestión", indicó.

Además, saliéndose del discurso que tenía preparado, también respondió a Santiago Pérez (XTF-NC) y Rubens Ascanio (Unid@s se Puede), que en sus intervenciones habían denunciado el "continuismo" que significaba la Alcaldía en manos de CC.

"La continuidad no es una sigla, son las formas de hacer la política, los proyectos que traen en los grupos las personas que lideran cada equipo en cada mandato", subrayó José Alberto Díaz, quien concluyó que "también hay que renovarse en la oposición".