Vecinos y usuarios de la playa de La Nea, en el litoral de Radazul, se levantaron el pasado viernes con el espectáculo de cientos de alevines varados en la misma orilla, una situación que en un primer momento causó cierta alarma entre los presentes y el propio Ayuntamiento de El Rosario, a pesar de que no era la primera vez que sucedía una cosa así.

En este sentido, la corporación local inmediatamente ordenó levantar un acta de lo sucedido, realizar una actuación de limpieza integral en el ámbito de la orilla, desarrollada por los efectivos de la empresa Urbaser, y analizar las aguas por si se trataba de un caso de contaminación.

Al día siguiente, el sábado, el posible foco de contaminación quedó descartado por completo según el resultado de los propios análisis efectuados, certificándose la inexistencia de un vertido que pudiera ser la causa de la aglomeración de los alevines muertos en la orilla.

A estos resultados se les sumó el indicativo de que todos los peces aparecidos eran de una misma especie, lo que refrendaba el diagnóstico realizado porque si no, aparecerían peces muertos de otras familias, según confirmaron fuentes consultadas del propio consistorio.

En cuanto a los motivos por los que los peces aparecieron sobre la arena de la playa, las mismas fuentes señalaron que "a pesar de que las causas no están muy claras, parece que puede ser por la confluencia de mareas altas con el desove de peces, lo que hace que los alevines queden varados al bajar la marea debido a la desorentación y que se vieran arrastrados por la corriente".

Otra de las posibles causas de que los alevines aparecieran en la orilla pudiera ser el descarte realizado por algún barco pesquero en las inmediaciones de la costa y que la corriente los llevara a la playa por la propia corriente, informaron las fuentes del Ayuntamiento de El Rosario consultadas.

En cualquier caso, se descarta que el resultado sea producto de una contaminación de las aguas.