El presunto fraude contable de unos 127.000 euros ocurrido en la Institución Ferial de Tenerife se inició en 2006 en el flujo de caja de la venta de entradas del Recinto Ferial, según recoge el informe realizado por una empresa externa a las cuentas de la entidad.

En declaraciones a los periodistas, el vicepresidente económico, Efraín Medina, ha señalado que le hubiera gustado "enterarse antes" del presunto desfalco, pero no ha sido hasta este momento cuando se detectó el presunto fraude, una vez se jubiló el jefe de Administración.

Medina ha apoyado que se haya presentado una denuncia ante la Fiscalía Provincial para que se esclarezcan los hechos, y ha insistido en que el Cabildo va a manejar este asunto con "total transparencia".

De hecho, ha comentado que ahora se va realizar una "auditoría forense" para llegar "hasta el final", y se relevará al gerente de la entidad, Ignacio Pintado, porque era el "responsable" del jefe de Administración.

Según el vicepresidente económico, es un tema "bastante grave", y a partir de ahora, ha dicho que los servicios jurídicos de la corporación marcarán los pasos a seguir, si bien ha querido tranquilizar la población avanzando que la programación del Recinto Ferial va a continuar, con cinco ferias previstas hasta final de año.

Medina ha comentado que el Cabildo realizada auditorías financieras y de cumplimiento en las empresas públicas, y en el caso del Recinto Ferial, no se había detectado ninguna irregularidad --la última fue en 2014--.