Jaime González Cejas (exalcalde), Ana Esther Flores, Nicolás Jorge y Georgina Molina renunciaron ayer a sus actas de concejales en el Ayuntamiento de Granadilla de Abona por motivos personales, profesionales y porque "es el momento adecuado, personal, político y temporal para dar un paso a un lado a dos años de las elecciones locales, abiertos todos los pactos posibles en Tenerife, Canarias y España y lejano todavía nuestros congresos". Es decir, de propiciar la renovación del PSOE granadillero y su grupo municipal.

Con la espada de Damocles que para los tres primeros supone la acusación de presunta prevaricación, tráfico de influencias y malversación por la gestión que realizaron en el periodo 2003-2007, los dimisionarios fueron respaldados ayer por cargos insulares, regionales y nacionales del PSOE, como Patricia Hernández, Tamara Raya, Olivia Delgado, Héctor Gómez, Josefa Mesa, Aurelio Abreu y Teresa Cruz. Además, asistieron los alcaldes de Guía de Isora, Pedro Martín; de Arona, José Julián Mena, y de Vilaflor, Agustina Beltrán, junto a concejales socialistas del Sur.

Aunque "pasamos a la reserva activa", matizó el exregidor, "cerramos con grandeza y generosidad, no exenta de tristeza, pero con firmeza, convicción y cabeza alta la intachable trayectoria de honestidad de todos nosotros al servicio de los intereses generales de los granadilleros y de la causa socialista". Jaime González, portavoz único de los dimisionarios, cerró 34 años como concejal (desde 1983), de los que 21 y medio (en 1991 lo hizo por primera vez) ejerció como alcalde "convirtiéndo a Granadilla en el municipio estratégico de Tenerife".

Esta "renuncia voluntaria e irrevocable", como manifestó insistentemente, se produce arropado por su sucesor como referente socialista en Granadilla de Abona, Juan Rodríguez Bello, para quien Jaime González Cejas "es el mejor alcalde de la historia", mientras que el presidente de la Gestora Insular del PSOE, Héctor Gómez, habló de quienes renunciaron a sus actas como activos de la formación política.

"Debemos dar paso a un nuevo ciclo político, dar el relevo a nuevos compañeros y compañeras, a nuevas ideas y a nuevas estrategias adaptadas a los tiempos y circunstancias actuales que faciliten la conformación de nuevas mayorías en Granadilla en torno y con el liderazgo de los socialistas granadilleros y volver a ser los más votados por los electores, por mayoría absoluta o relativa, como ha ocurrido durante siete legislaturas consecutivas, desde el año 1991".

Esa reflexión de Jaime González Cejas sintetiza el ambiente vivido ayer en la Casa del Pueblo de San Isidro, donde los socialistas de Granadilla de Abona pusieron el punto y final a su etapa más brillante con la marcha de quien los lideró durante las últimas tres décadas. Toma el relevo Juan Rodríguez Bello, concejal en activo desde hace varios mandatos, de quien el exalcalde destacó su talante conciliador como la virtud que puede contribuir "a que el gobierno municipal se relaje".

En la historia reciente, tres de los dimisionarios se enfrentan a 81 supuestos delitos de prevaricación, seis de tráfico de influencias y nueve de malversación, de los que a Jaime González le atribuyen seis presuntos delitos de prevaricación, seis de tráfico de influencias y uno de malversación; a Nicolás Jorge, 13 de prevaricación y dos de malversación; y a Ana Esther Flores, 11 de prevaricación y uno de malversación.

La censura, una infamia, ópera bufa y comedieta

La moción de censura que desembarcó al PSOE del gobierno municipal el 27 de septiembre pasado estuvo presente en la despedida de Jaime González Cejas, que definió el acto como "infamia política, opera bufa y comedieta", motivada por "meros intereses políticos estratégicos, económicos y espurios de ATI, Ciudadanos y PP, unido al fanatismo y frustración de las agrupaciones locales que solo ambicionaban ocupar el poder a cualquier precio".

La causa final es el triunfo en siete mandatos

González Cejas acusó al gobierno municipal actual (CC, PP y Ciudadanos) de que "vienen usando, desde hace años, declaraciones y argucias incompatibles con el estado de derecho y la presunción de inocencia, actuando de siniestros y oscuros inquisidores al ser incapaces, todos ellos, de contrarrestar o tener el apoyo mayoritario popular que nos han brindado los ciudadanos en siete legislaturas seguidas, motivo final de la moción de censura". Ahora queda a la espera de que C''s reclame la dimisión de una concejales de CC investigada.