Entre los grandes objetivos en los que actualmente trabaja el Cabildo de Tenerife en materia de carreteras está facilitar la movilidad en la Isla y, además, integrar el paisaje en las infraestructuras viarias para intentar minimizar y corregir el impacto ambiental que estas ocasionan.

Con ese propósito, la Corporación insular puso en marcha hace tres años un plan de choque, cuya finalidad consiste en mejorar y conservar los enlaces ubicados en vías de alta ocupación como son las autopistas y autovías, logrando una simbiosis entre paisaje y carretera de manera amable. En este tiempo, se han llevado a cabo más de un centenar de actuaciones repartidas por toda la Isla que han supuesto una inversión de 4,8 millones de euros y la regeneración de 1.100.000 metros cuadrados de superficie.

Para seguir avanzando en esta línea, la Corporación insular, según ha podido saber EL DÍA, ha decidido prorrogar este plan destinando una partida anual de 2,4 millones que se invertirán en la regeneración de casi un millón y medio de metros cuadrados. El plan, que es una de las piezas clave del programa de mejora del paisaje, forma parte del MEDI, el instrumento de gestión con el que el Cabildo quiere impulsar el desarrollo equilibrado de la Isla en los próximos años y cuenta también con financiación del Fondo de Desarrollo de Canarias (Fdcan).

El objetivo de este conjunto de actuaciones es mejorar el paisaje y, a partir de ahí, conservarlo con criterios de sostenibilidad y eficiencia. El hecho de integrar las carreteras en el paisaje es una buena manera de reducir las pérdidas de calidad ambiental y de conseguir una mejora visual a través de la combinación de materiales vivos e inertes de diferentes texturas y cromatismos. Se usa flora de alto valor ornamental, adaptable al medio y con bajos requerimientos hídricos.

El carácter decorativo se combina con el funcional, dado que, en algunos casos, se trata de zonas donde la pendiente no permite todo tipo de plantaciones por lo que se juega con materiales diferentes, adaptados a la situación.

El trabajo de las empresas que llevan a cabo las conservaciones contempla, también, la eliminación de especies invasoras como el rabo de gato. Es lo que se ha hecho, por ejemplo, en el enlace de Las Caletillas y en el del Polígono Costa Sur, donde se ha suprimido esta planta y se ha colocado una barrera de tarajales para impedir su proliferación.

En relación a este asunto, el director insular de Fomento y Movilidad del Cabildo, Miguel Becerra, explicó que "las empresas encargadas de estos contratos de conservación, distribuidos en tres zonas: norte, sur y oeste, están llevando a cabo ensayos para tratar de encontrar la manera ecológica de terminar con estas plantas".