El presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, ha afirmado hoy que a la corporación insular "nadie le da lecciones" en materia de energías renovables, lo que no impide que siga defendiendo la introducción del gas como transición para reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2).

Carlos Alonso realizó estas consideraciones en declaraciones a los periodistas tras ser preguntado por la decisión de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia de no considerar conveniente autorizar la construcción de la planta de gas natural licuado del puerto de Granadilla hasta que no haya garantías de su uso y estudios que comprueben su sostenibilidad económica.

El presidente de la corporación insular señaló que este requerimiento es "fácilmente solventable", aunque depende del Ministerio del área y de la empresa operadora, Gas Natural, aportar la información que se requiera.

Respecto a si esta decisión ha provocado satisfacción en el Cabildo de Gran Canaria, que en su momento rechazó la introducción del gas natural licuado, Carlos Alonso respondió que desea todo lo mejor a dicha isla y que trabaje "bien y mejor" en todos los ámbitos, en aguas residuales, desarrollo turístico y del puerto porque será bueno para Canarias.

"No me alegro nunca ni intento poner el pie encima a nada que Gran Canaria realiza", apuntó Alonso, quien insistió en que mira hacia delante, hacia lo que la isla necesita, y cree firmemente que en materia energética Canarias tiene que avanzar hacia un modelo de energías renovables.

Pero como transición la introducción del gas va a permitir ahorrar "muchísimo" en emisiones de CO2 y en el sistema eléctrico de Canarias.

Al respecto, afirmó que la Consejería del ramo ha aportado un dato "ilustrativo" en cuanto a que cada año que se pierde en la introducción del gas equivale al 40 por ciento de las emisiones del parque móvil de la isla de Tenerife.

"La introducción del gas sigue siendo necesaria desde el punto de vista ambiental y económico, y no va a impedir que sigamos avanzando en la introducción de energías renovables", reiteró Alonso, quien puntualizó que el Cabildo de Tenerife es el principal operador de energías renovables de Canarias y va a profundizar en esa posición con proyectos en curso.

Entre ellos figuran el desarrollo de nuevos parques eólicos y la aportación al ITER de 25 millones de euros para tres de estas instalaciones, lo que permitirá aumentar la potencia instalada, a lo que se suman otros proyectos para incrementar en casi 300 megavatios la potencia en energía fotovoltaica.

"Al Cabildo no le da nadie lecciones de renovables, y lo que queremos es que el gas se introduzca como energía de transición para permitir un escenario de mayor energías renovables, pero también de menos emisiones de CO2", insistió el presidente de la corporación insular.