Los socios de gobierno en el Cabildo de Tenerife, CC y PSOE, han evidenciado hoy sus diferencias en el pleno, durante la votación de dos mociones que han concluido con la derrota de los planteamientos de socialistas y Podemos gracias a la suma de votos de los nacionalistas y el PP.

En la primera de esas votaciones, CC y PP han sacado adelante un acuerdo en el que el Cabildo pide la devolución al Gobierno de España de los presupuestos generales del Estado, mientras que en la segunda han resuelto desistir "de la oferta actual" para la compra de un edificio a la familia del constructor Antonio Plasencia para uso sociosanitario e iniciar un nuevo proceso de compra, en contra del planteamiento de PSOE y Podemos, que proponían construir un centro sociosanitario nuevo y desestimar definitivamente la compra al empresario, condenado en casos de corrupción.

Pese a estas divergencias, que se han resuelto ajustadamente por 13 votos de CC y PP frente a 12 de PSOE y Podemos, ninguno de los dos socios en el gobierno insular ha mostrado de momento su intención de poner fin al acuerdo que mantienen desde el principio del mandato.

En el debate de la moción de CC y PP para rechazar de plano los presupuestos del Estado al considerar a Tenerife como "víctima de un recorte injustificado e injusto", tanto el PSOE como Podemos propusieron como alternativa reclamar las mejoras necesarias en inversiones en el trámite de las enmiendas parciales.

Aurelio Abreu (PSOE), vicepresidente primero del Cabildo, consideró que, en vez de rechazar los presupuestos, sería más constructivo instar a los diputados canarios a presentar y negociar enmiendas, como aseguró que hará el PSOE.

Fernando Savaté, de Podemos, defendió sin éxito un acuerdo unánime del Cabildo para demandar las mejoras necesarias en materia de pobreza o infraestructuras, ya que rechazar la totalidad del presupuesto supone renunciar a "avances sociales significativos".

Ana Zurita, del PP, replicó que los presupuestos del Estado son los peores de la historia para Canarias y solo persiguen "pagar prebendas" a los independentistas catalanes para mantener a Pedro Sánchez al frente del ejecutivo.

Jesús Morales, de CC, calificó de "malos y ruines" los presupuestos, y de incumplir el Estatuto y del Régimen Económico y Fiscal, mientras se premia a otras comunidades porque el Gobierno es "rehén de los independentistas catalanes".

En cuanto a la compra y adaptación por 29 millones de euros del edificio de la familia Plasencia, ubicado en la zona de Cabo Llanos de Santa Cruz de Tenerife, CC la defendió como la mejor, más rápida y quizás única alternativa para ubicar a los pacientes del Febles Campos mientras se procede a su remodelación.

No obstante, ante la "alarma social" que se ha creado por el expediente, CC respaldó la propuesta del PP, basada en desistir de "la oferta actual" de la empresa de la familia Plasencia, Carcaland, e iniciar un nuevo proceso de "búsqueda y adquisición" dentro del área metroplitana.

También se plantea en la moción del PP buscar otras alternativas, como una posible cesión de inmuebles de la Seguridad Social o un concurso para la provisión de plazas sociosanitarias.

Si no hay resultados en seis meses, se debe buscar suelo y construir un inmueble de nueva planta, de acuerdo con la moción del PP apoyada por CC.

Fuentes del gobierno insular indicaron que tras esta moción se convocará un concurso para la adquisición de un inmueble de la manera que determinen los servicios jurídicos y el consejo rector del Instituto de Atención Social y Sociosanitaria.

La consejera de Podemos Mila Hormiga denunció que la operación de compra del edificio de Plasencia supone "financiar la corrupción y someterse al poder empresarial" y afirmó que el expediente se ha montado para beneficiar a un condenado por corrupción que se jactaba de financiar a CC, PSOE y PP.

Miguel Ángel Pérez, del PSOE, afirmó que no está justificada la compra ni por qué se realiza de forma directa ni sin concurso, además de que el edificio no responde al modelo sociosanitario del Cabildo, que dispone de suelo público y proyectos para edificar sus propias infraestructuras.

Sebastián Ledesma, portavoz del PP, señaló que su grupo ha cambiado de criterio y defiende de forma clara y contundente que se desista de comprar el edificio de Plasencia, pero que el dinero consignado se destine a comprar un edificio en el área metropolitana.