El CEIP San Benito acerca desde el pasado mes de junio a una treintena de menores hablantes de entre 3 y 12 años el lenguaje de signos, una iniciativa que se desarrolla en el marco del campamento "Un verano de niñas y niños" que desarrolla en el centro de educación en colaboración de la Federación de Asociaciones de Personas Sordas de Canarias. Tocarse el lóbulo de la oreja para indicar el sexo femenino, colocar la palma de la mano abierta en la frente, como si de una cresta se tratara, para referirse a un gallo y recrear unos pequeños cuernos con los dedos para "hablar" de una jirafa son solo algunos de los signos que los menores han podido aprender de forma lúdica durante cinco semanas en el campamento de verano. Los signos de las letras, nombres, colores y animales forman parte ya del "vocabulario" de estos niños hablantes, quienes, al finalizar cada sesión, deben adivinar el cuento que les relata una de las monitoras sordas en lengua de signos, una actividad con la que los menores se muestran muy receptivos, según explican los educadores.