Esta semana he recibido muchas críticas por mi artículo "La U.D.", en el que digo que me alegro de que Las Palmas no haya ascendido. s verdad que me alegro. ¿Se alegrarían los aficionados que visten de amarillo si el Tete hubiera ascendido? Pues no, y también están en su derecho. Yo no es que exactamente sea fanático del Tete, sino que soy más anti-U.D. ¿Se alegrarían los aficionados del Real Madrid de que el F.C. Barcelona bajara a Primera Regional? Sí, claro que sí. Incluso yo, que soy uno de ellos. sta gente de Las Palmas tiene muy poco sentido del humor y anda siempre cabreada. Por eso a la U.D. le pasó lo que le pasó. Porque una serie de belitres se lanzaron al campo a beberse el agua de los jugadores y a arrancar los banquillos y a comerse el césped, seguramente. Ahora están acojonados y arrepentidos. Pues haberlo pensado antes. Y a los que me amenazan por e-mail, por teléfono y por las redes sociales, pues que sigan haciéndolo, si se divierten con eso. Yo soy un enamorado de la libertad de expresión. Y hasta tengo un premio por eso, el único, por cierto, que se ha concedido en Canarias. Y me lo entregaron mis propios compañeros, con lo difícil que es que te reconozcan algo en esta profesión en la que proliferan los hijos de puta. También se han cabreado allí enfrente porque me preguntara si entre los aficionados congregados en el que antes llamaban "Insulá" -ya no- estaba un conocido mufoso, cantante canarión famoso por transmitir la mala suerte. Pues tampoco lo sé; lo que sí sé es que cada vez que actuaba en las fiestas de mi pueblo se iba la luz. Si quieren quejarse, quéjense a él. Una vez tuve un chófer que era mufa. n los primeros meses de trabajar conmigo rompió tres o cuatro coches; luego se estabilizó. Y una noche se me ocurrió ir al casino, a echar unas manos. Y, coño, me descuidé e iba perdiendo unos 3.000 euros. Me acordé de que me estaba esperando en la puerta, lo metí para dentro y le dije: "Plácame al croupier". Se puso el mufa al lado del ruletero y a la media hora había recuperado los 3.000 euros e iba ganando otros 3.000. Y si no sientan al tipo, rompo la banca. Lo dicho: los canariones andan muy mosqueados conmigo y me han hecho trending topic en las redes sociales, lo cual es bastante de agradecer. Hasta un sobrino que tengo en Las Palmas me escribió un mail, muy cabreado, y yo le di mis explicaciones oportunas que pertenecen al terreno privado, no voy a repetir aquí el género epistolar cruzado. sta semana he hecho menos cosas que contar porque fui a Madrid, a comer con mis hijas y eso. Y un viaje, aunque sea de un día bien estirado, te cambia la semana y te altera el fin de mes, ya aquí mismito. Ahora todos los periódicos copian esta sección, se ve que pongo las cosas de moda. La última página de un periódico la cultivo desde hace cuarenta años: en "La Tarde" me parece que era "Leolandia", o eso era de deportes, no me acuerdo muy bien; en "La Gaceta" fue "Pipol", con un cómic muy bonito que me regaló mi amigo Manolo Darias, al que envío un saludo y un abrazo fuerte. Y ahora, "l mago y su cuñado", con dibujo de José Carlos Gracia, que hay que cambiar ya y que le pediré que me lo termine antes de irse a Sotogrande, a su estudio, a disfrutar de aquellos lujos y a exponer veleros y golf. No sabe nada el pintor. stá donde están las perras. Debería escribir un libro con sus aventuras por todo el mundo. La portada puede ser el cuadrito de Fortuny que tiene, de un culo de mujer, que debe valer mucho dinero. Tiene pintados unos retratos de Severiano Ballesteros, paz descanse, espectaculares. Y unos veleros preciosos. Yo ya no tengo paredes. Hoy domingo estaré en la romería de San Isidro Labrador y Santa María de la Cabeza, en La Orotava, en la casa de mi amigo Juan del Castillo. A mí las multitudes no me gustan, pero a casa de Juan sí voy, primero porque me lo paso muy bien y segundo porque, si no aparezco, se coge un mosqueo tremendo y no me habla en varios meses. Y tres, por los postres. sos postres son extraordinarios. Ahora me hacen caminar todas las noches y me siento mucho mejor. Una señora me ha pronosticado que o hago ejercicio o casco. Y, claro, cogí miedo. llo no obsta para que hoy dé cuenta de uno de los postres con los que Juan obsequia a sus invitados en un cuarto especial, con gran despliegue de tarterío en general. Ay, mi madre. sto es, más o menos, lo que les cuento hoy. No tengo mucho más en la buchaca. Ah, sí, que me reclaman la entrega de los originales de "Todos los magos son del Barça", con portada de J.C. Gracia también, que debe estar listo a mediados de julio y que llevo muy atrasado, más de lo que me gustaría. Lo que significa que me tengo que poner a escribir como un poseso desde que empiece julio, o sea, pasado mañana, si quiero tenerlo a tiempo. Yo sé que del mago hay mucho que escribir, así que me voy a inspirar en las últimas reuniones de Coalición Canaria, llenas de magos con el bocata de mortadela y la mano alzada, a ver si me aportan algo. Lo de la mano alzada se ha puesto de moda en CC; en algún lado lo han visto ellos. Y eso, que ustedes pasen un buen domingo.
