La del domingo pasado fue una jornada muy especial para un centenar de personas que recibieron en la playa de El Socorro, en el litoral de municipio de Güímar, el bautismo en un rito muy especial: el que sigue la tradición del mundo guanche.

Esta congregación tan peculiar y diferente une desde hace unos veranos, cuando llega el solsticio, la tradición prehispánica con algunas ceremonias cristianas. Antes en la playa tacorontera y norteña de El Sargo y ahora en el sur de Tenerife.

Los "nuevos hermanos y hermanas", que han decidido optar por un nombre aborigen como seña de identidad y también para hacer un sentido "homenaje a nuestros ancestros" gozaron del bautismo desde un profundo deseo de vivir la espiritualidad, pero "de manera tan sencilla como intensa" a través de la integración en el Seno de "Nuestra Diosa Madre Chaxiraxi" y en armonía con su obra mas perfecta, la naturaleza.

En una mañana de intenso calor, al mediodía tuvo lugar la ceremonia del bautismo. La jornada culminó en un ambiente especial con una comida de hermandad en el que destacaron las aportaciones culinarias de los asistentes al acto, ya tradicional. No faltó una exhibición de deportes autóctonos en una fecha en la que dos tradiciones se unen: la aborigen y la cristiana.