La Esperanza (El Rosario) vivió este domingo una de esas jornadas que la ha hecho característica. En una sociedad en la que la industrialización ha ido comiendo terreno al campo, algunos esperanceros han seguido aferrándose a las tradiciones y han conservado prácticas del pasado. Con tiempo típico de la zona -lluvia y frío-, varios guayeros realizaron la siembra de cereales a la antigua usanza, con sus yuntas de vacas y con la costumbre de ayudarse unos a otros para hacer más llevadero el esfuerzo del agricultor. La siembra tuvo lugar en la zona conocida como Azocas, y en ella se revivió una estampa que, cada vez más, parece de otro tiempo. José Luis Cruz, "El Carnita", propietario de los terrenos, y Domingo Cruz, su hijo, contaron con la ayuda de los guayeros Nono, Bartolo y Felillo. Ahora solo falta que el tiempo acompañe en adelante.