El día 8 de junio de 1963 se colocó la primera piedra de la iglesia Nuestra Señora del Rosario de Los Valles y fue el día 1 de enero de 1966 cuando quedó inaugurado el templo más querido de los valleros, los vecinos del ámbito de Valle Jiménez, Valle Tabares y Los Campitos, después de que el obispo de la Diócesis de Tenerife, Luis Franco Cascón, diera el visto bueno para el desmembramiento de estos enclaves de las parroquias de Nuestra Señora de la Paz y de la Unión y de la de San José de Santa Cruz de Tenerife.

En recuerdo de ese día, el domingo la iglesia de Valle Jiménez celebró su 50 aniversario, un acontecimiento al que asistieron personalidades sociales, políticas y eclesiásticas para dar fuerza a un plan que nació de los vecinos a principios de los años 60, especialmente de Eduardo Pérez Ascanio y Ana Gutiérrez Salamanca. Ellos, junto al cura Juan Jorge Dorta, asumieron en gran medida el coste económico de esta bella construcción, aunque los vecinos sufragaron los gastos del techo y objetos de complemento para su interior.

Ese es el recuerdo que se tuvo en un sencillo acto al que asistieron el obispo Bernardo Álvarez y el alcalde del municipio, José Alberto Díaz, quienes estuvieron acompañados por el párroco Juan Cirilo Pérez para descubrir una placa de recuerdo, celebrar una misa cantada por la Coral Polifónica del Círculo de Amistad XII de Enero e inaugurar una exposición en el local social.