El pueblo de Machado, en el municipio de El Rosario, volvió a convertirse hace unos días, por segundo año consecutivo, en el centro neurálgico ideal para disfrutar de las costumbres y la artesanía canarias con la celebración del II Día de las Tradiciones.

La plaza de la ermita de Machado y sus alrededores fueron el escenario perfecto para disfrutar -bajo un sol de justicia, eso sí- de las muestras de artesanía y de las exhibiciones del juego del palo, a cargo de la familia de Los Verga, o de bolas, gracias a los miembros del Club de Bolas Independiente Las Rosas de La Esperanza.

Además, hubo talleres de alfarería y de lana, así como una muestra de mantas esperanceras, grupos folclóricos y hasta la visita especial del corsario Amaro Pargo, quien relató en primera persona las principales vivencias de su histórica figura.

Por último, los asistentes pudieron degustar un cochino negro y el rico pan de leña de Machado. Para la noche quedó la espectacular Gala de las Tradiciones desarrollada en el espacio polivalente del terrero de Machado-Casa de las Tradiciones, que contó con las actuaciones del Grupo Jeita, Marco del Castillo Trío y Pieles.