El aeropuerto Tenerife Norte-Los Rodeos, siguiendo el programa establecido en su Plan de Autoprotección, realizó ayer un simulacro general de accidente aéreo para evaluar la capacidad de reacción, el grado de coordinación, los protocolos de cesión de mando de la emergencia, la atención a víctimas y familiares y el tiempo de respuesta de los colectivos e instituciones implicadas en la atención de una emergencia.

Según AENA, el simulacro verificó la correcta implantación de los planes de autoprotección y emergencia que se deben articular para atender una emergencia por accidente aéreo en el entorno del aeropuerto.

El ejercicio consistió en simular el accidente de un avión comercial tipo ATR-72 con 58 pasajeros y 4 tripulantes a bordo, que en la maniobra de aproximación para el aterrizaje colisiona en las cercanías del aeródromo.