Un pasito adelante más cada año. Es la consigna y realidad que acompaña a Sergio Rodríguez Febles (18/10/1993, Los Realejos). El tinerfeño afronta su tercer proyecto en la LEB Oro -segunda categoría del baloncesto español- enrolado en el Levitec Huesca, donde ya es uno de los jugadores más destacados con casi una docena de créditos aportados por compromiso.
Formado en la cantera del CB San Isidro, y luego reclutado por el CB Canarias -llegó a jugar una decena de partidos de la Liga ACB y debutó en la Copa del Rey de la mano de Alejandro Martínez-, Rodríguez señala estar "cómodo y contento" por la "imagen" que está dando su nuevo equipo, y por la suya propia.
"Sé que soy un jugador que ahora mismo tiene cierto peso e importancia en el equipo", señala un norteño que, a sus 24 años, está centrado en el día a día. Es su fórmula para seguir creciendo. "Es cierto que soy más maduro, pero tengo que mejorar en todo: en el tiro exterior, en defensa... Hay que ser muy constante y no llevarte por la gente que te quiere llenar la cabeza de pajaritos", explica.
El realejero tiene un sueño: "Volver a la ACB". Un espejo es el caso de su paisano Álex López, que está disputando su primera temporada completa en la élite nacional. "Me fijo en su situación y en otras. Álex jugó muchos años en LEB y, por ejemplo, Albert Oliver acaba de debutar con 39 años en la selección. Lo que quiero decir es que hay que seguir luchando, comprometido con el sueño que tienes".
Aunque aún no se sabe cuántos equipos podrán subir -la ACB decidió que uno; una decisión no aceptada por la FEB-, Rodríguez ve ya "un poco de esperanza", teniendo en cuenta que años atrás los ascensos no se materializaban. "Aquí hay ilusión sobre todo por la historia que ha tenido el club -12 temporadas en la ACB entre los 80 y los 90-, aunque nuestro objetivo es la permanencia. Estamos en media tabla y vamos a intentar mantenernos ahí".
Sergio Rodríguez reside en una ciudad de "muy pocos habitantes" -poco más de 50.000-, aunque con "mucha tradición deportiva" que "se respira en la calle. Tenemos tres proyectos deportivos del máximo nivel: el Huesca de fútbol -líder de Segunda-, el Bada Huesca de Liga Asobal de balonmano y nosotros".
"Agradecido", el alero no se olvida del tiempo que pasó en el Iberostar Tenerife y el trabajo que hicieron con él. "Fueron unos años maravillosos en los que aprendí muchísimo. Sin esas temporadas, no estaría donde estoy hoy en día". ¿Se imagina volviendo? "Ya vendrá lo que tenga que venir", manifiesta un realejero soñador a la par que trabajador.