Hoy se cumplen 50 años de la llegada del fuego olímpico que iluminó los Juegos de México 68 a San Sebastián de La Gomera. La corbeta "Princesa" de la Armada Española apareció por el malecón colombino minutos antes de las nueve de la mañana. Antes había repostado una tonelada y media de agua en el puerto de Las Palmas de Gran Canaria. El joven periodista Juan Cruz Ruiz (20 años) y el fotógrafo Jorge Perdomo contaron para EL DÍA las emociones de una jornada interminable. Las banderas de los países por los que la antorcha ya había desfilado se ordenaron milimétricamente alrededor del estandarte de México, la anfitriona de los Juegos Olímpicos que coronaron al saltador Bob Beamon.

Este fue el segundo encargo como enviado especial que Juan Cruz Ruiz recibió de Ernesto Salcedo: "Antes me mandó a El Paso (La Palma) para que entrevistara a Pedro Capote, empresario ligado a la industria del tabaco", recuerda el portuense. En San Sebastián de La Gomera ofrecieron sus discursos Nicolás García, Gobernador Civil de la provincia, Estévez Méndez, por aquel entonces subjefe principal de El Movimiento, y un representante del Comité Olímpico Español que trasladó a José Dávila, delegado de la expedición azteca que se presentó en Canarias. Hubo intercambio de placas y de una réplica de la antorcha, obsequio del pan sagrado, bailes típicos y unas cuantas horas de jolgorio entre unas calles cuyo firme aún era de tierra...