Los vecinos de la calle XII de Octubre, en la villa de La Orotava, celebraron su día, el pasado viernes 12, por segundo año consecutivo. Una jornada de la Hispanidad de convivencia cuyo momento culminante fue el almuerzo.

Una exposición de motos antiguas, el carrito de chucherías de Eusebio, los juegos infantiles, tradicionales, de mesa o sortijas, así como las proyecciones de fotos con la historia de la zona y de personas ya fallecidas, fueron algunas actividades durante la fiesta de confraternización entre quienes viven muy cerca y apenas pueden relacionarse.

Los residentes en la también conocida como calle Cuarta del barrio de La Cruz de la Cebolla pretendían rememorar viejos tiempos y los actos que se celebraban allí hace tres décadas con motivo de las fiestas populares.

Más de 250 vecinos de varias generaciones acudieron a la convocatoria. Entre ellos, el alcalde, Francisco Linares; el concejal, Óscar Pacheco, que vive en la calle, y el párroco Óscar Guerra.